lunes, junio 29, 2009

honduras: SE QUEMA LA CASA DEL VECINO, ¿QUÉ HACEMOS?



Gabriel Serrano, Alcalde Municipal de San Julián Cacaluta

Publicación Original en http://moncadalectores.blogspot.com/

Si ves salir humo de la casa de al lado, sales corriendo y alertas a tus vecinos, no lo haces porque sean tus buenos amigos, o porque te interese tanto salvar sus vidas, o sus pertenencias; lo haces simplemente porque las llamas ponen en peligro tu casa. Otra opción sería llamar a los bomberos, y si eres un buen vecino te pones a lanzar agua, y tratas de ayudar a rescatar vidas u objetos; cualquier acción es recomendable menos la de hacer nada.

¿Qué hacemos los hermanos latinoamericanos ante el último atropello a la democracia cometido en Honduras por grupos facticos de poder? La oligarquía Hondureña irrespeta la voluntad del pueblo y en busca de mantener el estatus quo, utilizan a la fuerza armada y envisten en contra del presidente Manuel Zelaya, quien representa la esperanza de la mayoría de hermanos Hondureños especialmente los más pobres. El presidente Zelaya marca el fin de décadas de gobiernos autoritarios, y encamina el hermano país hacia una era de cambios sociales que enmarcan a este país Centro Americano en la corriente de avanzada que representan gobiernos que caminan de la mano de sus pueblos y se alejan de los intereses de grupos oligárquicos, por los cuales han gobernado los regímenes de derecha en toda Latino América.

Los pueblos declaramos nuestra solidaridad con el hermano pueblo Hondureño, pero a la vez demandamos una respuesta enérgica, clara y expedita de parte de nuestros gobiernos. Lo que sucede en Honduras es algo que no debe prevalecer; los golpistas Hondureños desafían la voluntad del pueblo y también pisotean los principios democráticos que rigen la comunidad de países representados en la Organización de Estados Americanos. La OEA renovó su compromiso con el funcionamiento de la democracia representativa en Junio 1991 en Santiago de Chile. Este compromiso es puesto a prueba por los golpistas que momentáneamente han depuesto al presidente Zelaya. Este evento demanda una reunión urgente del Concejo Permanente de la OEA

El Concejo Permanente de la OEA en este caso funciona bajo el siguiente principio; “… En el evento de ocurrencias que den lugar a la interrupción repentina o irregular del proceso político institucional o del legitimo ejercicio del poder por un gobierno democráticamente electo en cualquiera de los estados miembros de la OEA en orden dentro del marco de los estatutos de la organización convocar a una reunión de carácter urgente…” más adelante declara que ” el objetivo de esta reunión será analizar los eventos y en forma colectiva adoptar decisiones que se consideren apropiadas dentro del los estatutos de la organización y las leyes que rigen la comunidad internacional de naciones” (El Compromiso de Santiago , OEA doc. AG/RES.1080 XXI-09/91, Junio 5, 1991)

En el caso de la violación al orden internacional que ha ocurrido en Honduras la OEA debe en primer lugar condenar el golpe de estado y demandar inmediatamente se reintegre el gobierno legitimo del presidente Zelaya quien fue electo democráticamente por el pueblo Hondureño. En este caso la demanda de la comunidad internacional debe incluir el llamado a que se respete el derecho del pueblo Hondureño a elegir a sus gobernantes. Recomendación debe ser girada a todos los estados miembros a abstenerse de reconocer al gobierno golpista, incluyendo la suspensión de toda actividad comercial, financiera y económica con el “gobierno” golpista.

Finalmente los estados miembros deben retirar inmediatamente a sus representantes diplomáticos y emitir una resolución que deje claro a los golpistas que un gobierno de facto no encontrará cabida dentro de la organización. La respuesta de los estados Latino Americanos debe ser clara, esta crisis es parte de una práctica que debe quedar en el pasado, y que de ser permitida sentaría un precedente nefasto cuyas ramificaciones traerían consecuencias lamentables para los procesos democráticos de nuestros pueblos, pueblos que se unen en toda medida necesaria a sus hermanos Hondureños. Esta es una mayor razón para que los ministros de relaciones exteriores reunidos emitan declaraciones urgentes que no solo rescaten la estabilidad del estado comandado por el presidente Zelaya, sino que también prevenga una posible desestabilización de los países del área Centroamericana.

Cabe en este momento aplaudir los pronunciamientos de los presidentes de toda Latinoamérica que han declarado su apoyo al Presidente Celaya, tal como lo hizo el Presidente Funes esta mañana.

Finalmente, esta es una oportunidad de oro para que la OEA saque el pie que tiene en la tumba y demuestre que merece vivir.

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