martes, diciembre 29, 2009

Hambre de amor


sábado 19 de diciembre de 2009
Marcelo Colussi

Antonio Bressani, el joven antropólogo graduado con honores en Milán, lo pensó una y mil veces antes de tomar la decisión. Finalmente, aceptó: formaría parte de la expedición al Amazonas peruano que estaba organizando la universidad. Sólo imaginarse ese destino lo fascinaba; poder concretarlo, ni se diga.

Aunque no dejaba de preocuparlo también, pues la fiereza del grupo mawambi que visitarían lo tenía algo consternado. ¿Caníbales? No lo podía creer. ¿Caníbales en el siglo XX?

Era la primera vez que visitaría una selva.

Se defendía aceptablemente en portugués (tendrían que remontar el río Amazonas desde Brasil) y en español (el pueblo a investigar estaba en territorio peruano, y aunque muy poco, algo hablaban en lengua española). Del mawambi, el idioma del grupo con el que estarían conviviendo por espacio de cuatro meses en lo profundo de la jungla, apenas si conocía los rudimentos básicos. Como todo el grupo de antropólogos italianos, lo terminaría de aprender con el pueblo originario en su contacto directo.

Fue llegar a la selva y quedar hipnotizado. Las incomodidades prácticas del viaje ya en terreno no le preocuparon; la belleza de lo que estaba conociendo le pareció infinitamente más importante. En varias ocasiones pasó largas horas solo, en silencio, contemplando extasiado el follaje. Ese espectáculo se le hacía sobrecogedor. Parecía hipnotizado.

La universidad de Lima había hecho los arreglos del caso y, traductor mediante, más cuatro antropólogos peruanos que se sumaron al grupo, a los ocho antropólogos italianos no les resultó especialmente difícil establecer contacto con los mawambi.

En realidad, había más mito que verdad en lo que se decía de este pueblo; no eran antropófagos en sentido estricto sino que tenían ciertas prácticas con contenidos más o menos cercanos a la antropofagia. Básicamente comían los huesos de los muertos, años después de enterrados y una vez que los tejidos blandos habían desaparecido, molidos y mezclados con hierbas afrodisíacas. Había alguna información también, no confirmada por los antropólogos citadinos de Perú y por algunos estadounidenses que habían estudiado esta etnia, que en determinadas ocasiones tenían prácticas caníbales con los enemigos derrotados. Por lo pronto algunos miembros, sólo algunos, solían llevar algún hueso humano colgado como atavío. Antonio, ante todo eso, además de aterrarse, quedaba cautivado.

Fue verla y quedar más cautivado aún que con la espesura de la vegetación. Estaba semidesnuda, al menos para la usanza italiana u occidental, aunque llevaba una indumentaria que, en todo caso, realzaba más lo erótico, ocultando más de lo que permitía ver. Vestía una falda de una rústica tela anaranjada brillante y un collar de huesos -extraños huesos, de variadas formas- que le daba un par de vueltas al cuello ocultándole a media los nacientes pero ya bastante bien desarrollados pechos. Tenía 14 años. Se miraron y se sonrieron.

Awamble-puri, “Hija de la luna” en mawambi, era la hija del jefe principal. La última hija, la más pequeña, nacida cuando ya los padres no pensaban tener más descendencia. Por tanto, era la consentida, la especialmente mimada entre los once hermanos. En una mezcla de idiomas, más con gestos que con palabras, se comenzaron a comunicar. Para Awamble-puri hubo también algo de flechazo. Antonio, entre los italianos al menos, no era precisamente el más apuesto ejemplar: algo encorvado, de una delgadez extrema y aspecto desgarbado, lentes con un anticuado y pesado marco de carey negro, algo de acné juvenil -pese a sus 28 años- y una expresión de eterno despiste, su figura distaba mucho de aquella del amante latino a la que el cine de su país tenía acostumbrado al público con ese estereotipo. Pero para una muchacha casadera de un grupo indígena en las profundidades de la selva amazónica, un varón de piel tan blanca, cabellos amarillos y ojos color verde era una novedad absoluta.

Sin poder explicar cómo, se enamoraron.

En realidad, ninguno de los dos tenía mucho que explicar: el amor es así, no repara en detalles, etnias ni costumbres. Se enamoraron, aunque ello pueda parecer raro, y punto.

A los compañeros de Antonio les resultó alto extravagante el hecho. Más que nada, fueron bromas las que surgieron, siempre con el ánimo de festejar la noticia. Pero por el otro lado, para la familia de Awamble-puri, la situación no era un simple detalle: tenía el valor de problema comunitario. Por lo pronto, todo el grupo se reunió en consejo especial de emergencia, sin convocar a los visitantes italianos. Incluso no era un pequeño problema, una cuestión práctica menor: era algo que tocaba los cimientos mismos de su cultura. Se debatía sobre si un miembro del grupo debía cruzarse con un extraño -tan feo, por lo demás, según sus criterios estéticos- como Antonio. El debate tomó largas horas. Finalmente la tribu decidió asentir la unión. Solemnemente, el padre de Awamble-puri se acercó al italiano, y ante su asombro, lo abrazó. Antonio sólo comprendió que lo felicitaba, sin captar exactamente el porqué. Pero luego, cuando ya todos, primero el consejo de ancianos, luego sus futuros cuñados y por último los demás miembros masculinos del grupo lo continuaban abrazando con rostros felices, entendió: ¡ya se podían casar!

Y se casaron.

No sin discusiones, con otras nuevas interminables reuniones secretas del grupo mawambi, finalmente la tribu -los varones ante todo, la opinión de Awamble-puri no parecía contar mucho en esto- decidió sobre la propuesta de Antonio: los recién casados podían viajar a la tierra del forastero. Es decir: se irían a vivir a Italia.

Los otros siete antropólogos italianos, más los cuatro peruanos que constituían el grupo investigador original, ya se habían marchado hacía varios meses. Awamble-puri y Antonio pasaron varias lunas hasta que decidieron irse -o mejor dicho, hasta que consiguieron la autorización para hacerlo-.

Y se fueron.

Ya en Italia, para la muchacha todo resultó un cambio tremendo. Joven e inteligente como era, no le costó mucho aprender rápidamente un italiano básico que le permitía moverse con relativa soltura. Entre ellos dos se comunicaban parte en italiano, parte en mawambi. De todos modos, pese al amor enorme que los unía y a los esfuerzos inmensos que hacía Antonio para ayudarla en su proceso de inserción, el trasplante no le fue en absoluto fácil. Tuvo que aprender casi todo de nuevo; la vida en una gran ciudad como Milán, con gente nueva, en un contexto cultural tan radicalmente distinto, se le tornó agobiante. Sólo el inconmensurable amor que se profesaban logró retener a Awamble-puri en Italia.

Y así llegó el primer hijo.

Pasquale nació sano y robusto. Eso llenó de alegría al padre; pero no tanto a la madre. Los primeros tiempos Awamble-puri encontró en su recién nacido el motivo que más o menos la animó. Sin embargo, pasados unos pocos meses la tristeza volvió a invadirla. Y esta vez nada logró moverla de ese estado. Regalos, paseos, promesas, cariños renovados, o ni siquiera el pequeño Pasquale, fueron suficientes para animarla. Sumida en una profunda nostalgia que la tenía postrada todo el día, finalmente Awamble-puri, con el más hondo dolor del alma, decidió volver a su tribu en la Amazonia.

Más grande aún fue el dolor de Antonio. Él no quería retornar a la selva; su vida estaba en la universidad en Milán. El libro que estaba por publicarse sintetizando el trabajo antropológico desarrollado en el Perú -“Entre árboles, pantanos y esperanzas” llevaría por título, y él aparecía como colaborador principal- no logró disiparle la melancolía profunda que también lo había invadido. La llegada del hijo sólo en muy pequeña medida lo lograba sacar de ese estado.

En principio habían pensado que Antonio acompañaría a Awamble-puri hasta Lima, y de allí a Iquitos, donde ella, con ayuda de gente de la zona, llegaría por sus propios medios a su tribu. El niño quedaría con el padre en Italia. Así lo decidieron.

Llegado el momento de la partida, Antonio no pudo resistir el dolor y cambió de parecer: no aguantaba acompañarla hasta Perú, por lo que la despidió en el aeropuerto de Milán, con un beso apasionado “para todo un siglo”, según le dijo en italiano.

Ambos lloraron desconsoladamente. Luego, como siempre, el tiempo va cerrando -al menos un poco- las heridas. Aunque nunca del todo. De todos modos, para ambos la vida siguió su curso. Awamble-puri pudo rehacerse más rápidamente. Con algunas pequeñas dificultades que fue resolviendo sobre la marcha sin mayores sobresaltos, llegó de regreso a su hogar. Luego de la tremenda sorpresa inicial, fueron seis días de celebraciones para darle la bienvenida, en una confusa mezcla de alegría por el retorno, llanto por el fracaso, vergüenza y cólera por la deshonra. Nada se podía hacer con respecto a Antonio y el niño, que habían quedado en otro extremo del mundo. Sólo evocarlos, con tristeza, con odio, pocas veces con dulzura.

Para Antonio la separación fue infinitamente más traumática. Tres semanas después de la partida de Awamble-puri, en un rapto de emotividad, sin consultarlo con nadie y dejando el niño al cuidado de su madre, salió en forma abrupta hacia Perú. La misión que se había impuesto era traer nuevamente a su esposa hacia Italia, con la renovada promesa que ahora las cosas serían distintas. La idea de otro hijo pensó que podría motivarla, y eventualmente, unirlos más.

Tras varias peripecias prácticas, una tarde de torrencial lluvia tropical llegó, solo, al poblado mawambi. La sorpresa fue mayúscula.

Nunca quedó claro cómo fueron exactamente los acontecimientos. Para un desprevenido y prejuicioso observador occidental sería muy fácil decir que “los aborígenes se lo comieron”. La situación fue mucho más compleja. Seguramente como parte de alguna, al menos para nosotros, incomprensible práctica cultural mawambi, los varones de la tribu, luego de someterlo a un penoso juicio, le dieron muerte, luego de lo cual las mujeres pudieron ver el cadáver, y sólo después, cuando ya estaba trozado convenientemente, Awamble-puri fue llamada y convocada a comer el trozo que le ofrecían. Ella nunca supo qué pedazo de Antonio fue el que se comió (cocinado, valga aclarar). Al hacerlo sintió una rara combinación de sentimientos, pero fundamentalmente: venganza que hacía justicia.

Un pequeño hueso del pie -una falange del dedo gordo más precisamente- fue agregado a su collar, que sigue luciendo altiva en su mundo, esa selva que la vio nacer y crecer como hija de un soberano.

En Italia Pasquale nunca supo el final de esa historia; más aún, nunca supo nada de su madre. Sus abuelos silenciaron los hechos, y el muchachito creció convencido de otra versión, la que le inventaron, mucho más suave. Ahora es músico. Más exactamente: etnomusicólogo y -¿astucias de la razón?, ¿ironías del destino?- está por viajar al Amazonas para estudiar en terreno la música de los pueblos mawambi, en las profundidades de la selva peruana.

Tomado del libro “Historias dulces color de rosa”, de próxima aparición.

Los amigos de Leda Valladares festejarán con cantos sus 90 años



Lunes 21 de Diciembre de 2009

A lo largo de su vida cantó, hizo música para teatro y cine, e investigó las tradiciones y los cantos antiguos.

La artista, que en las décadas del 60 y del 70 publicó una serie de discos documentales, estuvo en esta ciudad en 2000. la gaceta / archivo - antonio ferroni

BUENOS AIRES.- Profesora de filosofía, poeta, cantora, compositora y musicóloga que dedicó su vida a conocer, registrar, proteger y difundir la música anónima y originaria argentina, Leda Valladares es una artista esencial que hoy cumple 90 años, y sus discípulos se lo celebrarán cantando.

Aunque la creadora se encuentra internada desde hace 10 años y padece el mal de Alzheimer, su continuadora Miriam García encabezará una comparsa de unos 20 miembros que se acercará a saludarla y a cantarle.

"Nosotros la queremos y la valoramos por ser una persona que dejó una obra que sigue germinando y produciendo acciones y que tiene una vigencia increíble", subrayó García.

La cantante, docente y gestora que asume el legado de Leda y lo exhibe en el marco de la intensa actividad de El Bagualazo donde plasma su labor en torno al canto colectivo, lamentó que "la obra de Leda tenga escaso reconocimiento de parte del mundo del folclore comercial que todavía no se atreve a comprender su trabajo".
En un escrito de Miriam para la revista "Devenir", describió a Valladares como "una visionaria que sigue siendo un referente contundente con una obra para seguir asombrando". "Ella siempre estuvo obsesionada porque estos repertorios de cantos antiguos se conocieran y se cantaran, que no siguieran ocultos, que lo cantaran sobre todo los niños y jóvenes, y los maestros en el aula. Leda ha sido además una exquisita cantante que con su interpretación supo ahondar como nadie en las profundidades de estos cantos y resaltar su magia y su misterio", dijo.

Formación
Valladares nació en Tucumán el 21 de diciembre de 1919 y antes de cumplir los 20 años formó su primer grupo de música: F.I.J.O.S (Folclóricos, Intuitivos, Jazzísticos, Originales y Surrealistas) que compartió con otros jóvenes audaces y talentosos de la talla de Adolfo Abalos, Manuel Gómez Carrillo, Enrique "Mono" Villegas y Gustavo "Cuchi" Leguizamón.

A lo largo de su camino cantó jazz, hizo música para teatro, cine y TV y se unió a María Elena Walsh con quien actuó con gran suceso en la Argentina, Europa y Estados Unidos y registró varios álbumes, seis de ellos en Francia.

Entre 1960 y 1974 publicó una serie de discos documentales llamados en conjunto "Mapa Musical Argentino" y luego lanzó otras trabajos de similar carácter como "Grito en el cielo" (1989), "Grito en el cielo II" (1990) y "América en cueros" (1992).

Con estos trabajos logró dejar testimonio de su actividad y mereció la atención de León Gieco, Suna Rocha, Gustavo Santaolalla, Fito Páez y Pedro Aznar, entre otros músicos. "Siempre hemos tratado de darle a la gente joven los misterios de lo que se viene cuidando, perpetuando, para que esos misterios no desaparezcan. Han quedado discos, pero todo lo que es moda siempre tiene un apoyo que no tiene lo que es tradición, que parecería que está abolida o superada", dijo la artista en una de sus últimas entrevistas.

Ideario
Su fecunda tarea también la volcó en libros como "Cantando las raíces" del que publicamos dos fragmentos que sintetizan parte de su ideario vital:
-"Cantar no es gobernar un caudal aéreo o melódico. Es algo profuso y subterráneo. Caer en concavidades desconocidas y volver a la superficie con fuegos y metales, con picos y planicies, con savias y arenas".

-"Cuando el canto pierde rugidos y lamentos, magia y sabiduría ancestral, se perfeccionan proezas, la voz se decolora y se convierte en un juego estético o simple pasatiempo. Las triviales modas de lo popular, la solapada búsqueda de agradar al soberano y adormecer el gusto propalan todos los vicios del cantor aceitado y bucodental, así pasamos al canturreo híbrido que nos inunda y anestesia". (Télam)

Confrontaciones en Copenhague



20 Diciembre 2009

En Copenhague, en las discusiones sobre las tasas de reducción de los gases productores del cambio climático se enfrentan dos visiones de mundo: la de la mayoría de los que están fuera de la Asamblea, venidos de todas partes del mundo, y la de los pocos que están dentro, que representan a los 192 estados. Estas visiones diferentes están cargadas de consecuencias, significando, en el límite, la garantía o la destrucción de un futuro común.

Los que están dentro, fundamentalmente, reafirman el sistema actual de producción y de consumo, incluso sabiendo que implica sacrificio de la naturaleza y creación de desigualdades sociales. Creen que, con algunas regulaciones y controles, la máquina puede seguir produciendo crecimiento material y ganancias como ocurría antes de la crisis.

Pero hay que denunciar que justamente este sistema es el principal causante del calentamiento global al emitir anualmente 40 mil millones de toneladas de gases contaminantes. Tanto el calentamiento planetario como las perturbaciones de la naturaleza y la injusticia mundial son consideradas como externalidades, es decir, como realidades no intencionadas y que por eso no entran en la contabilidad general de los estados y de las empresas. Lo que cuenta en definitiva es el lucro y tener un PIB positivo.

Pero ocurre que estas externalidades se han vuelto tan amenazantes que están desestabilizando el sistema-Tierra, mostrando el fracaso del modelo económico neoliberal y poniendo en grave peligro el futuro de la especie humana.

No pasa por la cabeza de los representantes de los pueblos que la alternativa sea cambiar a un modo de producción que implique una relación de sinergia con la naturaleza. La sola reducción de las emisiones de carbono manteniendo el mismo pillaje de los recursos es como si pusiéramos un pie en el cuello de alguien y le dijéramos: quiero que seas libre, pero con la condición de que sigas teniendo mi pie en tu cuello.

Precisamos impugnar la filosofía subyacente a esta cosmovisión. Ella desconoce los límites de la Tierra, afirma que el ser humano es esencialmente egoísta y que por eso no puede cambiar, que puede disponer de la naturaleza como quiera, que la competición es natural, que por la selección natural los débiles son engullidos por los más fuertes, y que el mercado es el regulador de toda la vida económica y social.

Por el contrario, reafirmamos que el ser humano es esencialmente cooperativo, porque es un ser social, pero se vuelve egoísta cuando rompe con su propia esencia. Dando centralidad al egoísmo, como have el sistema del capital, have imposible una sociedad de rostro humano. Un hecho reciente lo demuestra: en cincuenta años los pobres recibieron 2 billones de dólares de ayuda mientras que los bancos recibieron 18 billones de dólares en un año. No es la competición lo que constituye la dinámica central del universo y de la vida sino la cooperación de todos con todos. Desde que se descubrieron los genes, las bacterias y los virus como principales factores de la evolución, no se puede sostener la selección natural como se hacía antes. Ésta sirvió de base para el darwinismo social. El mercado entregado a su lógica interna enfrenta a todos contra todos y así desgarra el tejido social. Postulamos una sociedad con mercado, no de mercado.

La otra visión, la de los representantes de la sociedad civil mundial, sostiene: la situación de la Tierra y de la Humanidad es tan grave que solamente el principio de cooperación y una nueva relación de sinergia y de respeto hacia la naturaleza podrán salvarnos. Sin eso vamos hacia el abismo que hemos cavado nosotros mismos.

Esa cooperación no es una virtud cualquiera. Es aquella que en otro tiempo nos permitió dejar atrás el mundo animal e inaugurar el mundo humano. Somos esencialmente seres cooperativos y solidarios sin lo cual nos devoramos unos a otros. Por eso la economía debe dar lugar a la ecología. O hacemos este viraje o Gaia puede que continúe sin nosotros.

La forma más inmediata de salvarnos es volver a la ética del cuidado, buscando el trabajo sin explotación, la producción sin contaminación, la competencia sin arrogancia y la solidaridad a partir de los más débiles. Éste es el gran salto que se impone en este momento. A partir de él la Tierra y la Humanidad pueden llegar a un acuerdo que salvará a ambos.

ALBERT PLA


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[Xavier Pintanel © Prohibida su reproducción sin permiso del autor aun citando la procedencia]

Albert Pla, nacido en Sabadell (Barcelona) a mediados de los años sesenta, desarrolla desde la segunda mitad de los años ochenta, una de las carreras artísticas más completas, originales, creativas e incisivas de la escena musical española.

Compositor, cantante, músico, y por lo tanto cantautor, ejerce de cronista de las esquinas olvidadas de la vida, y de los protagonistas anónimos de la historia del mundo de a pié. Actor en el cine y también en el teatro, asume el lado tragicómico de la existencia desde la poesía urbana más explicita y desacomplejada, desterrando el monopolio de la metáfora del discurso de la canción y del cantautor hasta su llegada.

Podríamos dividir su trayectoria musical en tres etapas fundamentales:

Una primera aparición en la escena de la canción en catalán como cantautor de derribo de los cánones establecidos.

Una segunda etapa en la que abraza la rumba junto con la lengua castellana, y se acerca progresivamente a las orillas más radicales del rock y sus alternativas más tóxicas.

Y una tercera en la que la libertad creativa toma el mando sin tapujos y con alternancias lingüísticas, en la que asume cada proyecto como un nuevo reto hacia el arte total, multimierda, como le gusta denominar a sus espectáculos, hacia la crónica de la vida en su estado más puro y brutal.

Albert Pla no es solo un cantautor diferente que ha influenciado a varias generaciones más allá de los estilos y que es reivindicado por los nuevos artistas, sino uno de los más grandes y más lúcidos trabajadores que tiene nuestro arte, quizás por eso es lo más parecido a un genio.

Gerard Quintana
Trovador

Una Revolución es el hecho cultural por excelencia


* Palabras en la inauguración de la Casa del ALBA en La Habana.

Cuba, inauguración de la Casa del ALBA (12 de diciembre de 2009)

El pensador caribeño, y del Tercer Mundo en su conjunto, Frantz Fanon sostuvo que una revolución es el hecho cultural por excelencia de un pueblo. Y recientemente dijo el compañero Fidel que una revolución solo puede ser hija de la cultura y las ideas. Criterios como esos expresan los vínculos indestructibles entre un auténtico proceso revolucionario y una auténtica cultura. Nuestra América nos ha dado ejemplos señeros del hecho.

Bástenos recordar la relación profunda entre el gran héroe de lo que Martí llamó “el poema de 1810″, Simón Bolívar, y su maestro Simón Rodríguez. El juramento hecho por el primero de ellos ante el segundo, en Roma, anunció tanto la futura revolución de independencia política de Hispanoamérica, como su independencia cultural, la que empezó a realizar, según se ha dicho, el otro maestro de Bolívar, Andrés Bello, en el primero de sus grandes poemas americanistas.

Y avanzando en el tiempo, pronto conmemoraremos el centenario de la Revolución Mexicana de 1910, cuyas repercusiones culturales en el continente iluminarían la primera mitad del siglo pasado. Iniciada la segunda mitad de esa centuria, la Revolución Cubana triunfante en 1959, orientada siempre por José Martí, nos daría nuevos ejemplos del hecho. De ahí que, incluso cuando no se había firmado aún la Ley de Reforma Agraria, de mayo de 1959, con la cual se ratificaba el carácter radical de esa Revolución, ella había creado ya relevantes instituciones culturales: en marzo, el Instituto Cubano de Cine, y en abril, la Casa de las Américas.

Esta última, fundada por la gran heroína revolucionaria Haydée Santamaría, quien la dirigió hasta su muerte trágica en 1980, y ha seguido siendo orientada por ella, está cumpliendo 50 años, como la Revolución que la creó. Dadas mis relaciones con la institución durante muchas décadas, no me corresponde hacer su elogio. Pero, con gran generosidad, acaban de hacerlo, en la reciente Feria del Libro de Venezuela, dedicada a la Casa de las Américas tanto el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, compañero Hugo Chávez, como su ministro de Cultura, compañero Héctor Soto.

Al medio siglo de creada la Casa de las Américas debo el honor de haber sido invitado a decir estas pocas pero fervientes palabras. Ellas se pronuncian en la inauguración formal de la Casa del ALBA en Cuba. Aunque contando con la estrecha colaboración de muchos de los mejores intelectuales de nuestro continente, y no pocos de otras áreas, la Casa de las Américas había permanecido, como institución, solitaria. Por ello no podemos sino ver con alegría y orgullo la aparición en varios de nuestros países, durante el siglo XXI, de Casas del ALBA.

Saludamos hondamente la que se inaugura hoy en Cuba, y le deseamos largos y fecundos años de labor cultural y revolucionaria, “que no es lo mismo, pero es igual”, como dijo en una canción nuestro Silvio Rodríguez.

(Tomado de La Jiribilla)

Desbordante concierto del trovador Norge Batista en el teatro Tunas



28 de Diciembre de 2009, 8:30 am

Texto y fotos: Miguel Díaz Nápoles

Las Tunas.- Una apoteósica empatía entre el público y el cantautor Norge Batista, fue la característica fundamental del concierto Con malos ojos, que el insigne trovador de la oriental provincia de Las Tunas regaló anoche a sus coterráneos como despedida del actual 2009.

El emblemático Teatro Tunas se convirtió, una vez más, en un espacio para la complicidad entre el trovador y su público, que lo aplaudió con delirio durante las dos horas que duró el concierto, que a decir del propio Norge desbordó todas sus expectativas.

Temas como Con malos ojos, título de su último CD que está por ver la luz, Canción de Ánxeles, Molinos, A empezar otra vez, La Cueva, Cantiga da outono, Colgado en la pared, Lucía, Mercedes, Si esta luna no te salva y muchas otras, colmaron el recinto cultural, como un magnífico regalo de fin de año para un numeroso grupo de amantes de su música, cuyas edades van desde la adolescencia hasta de la tercera edad.

AmpliarUn momento conmovedor fue cuando Norge acompañó a su pequeña hija Lucía, quien cantó la emblemática canción infantil Mariposita y cocuyo, del destacado compositor de Las Tunas Tony Miranda.

Una de las características del concierto de Norge fue la cantidad de amigos, músicos como él, que lo acompañaron en el escenario, entre los que figuran el septeto Contrapunto, el grupo vocal Melisma, los trovadores Freddy Laffita y Omar Cusidó, Mónica Miranda, el grupo Cáriz, entre muchos otros.

En cada uno de los temas, Norge conversó con el público sobre cuándo y cómo surgieron, en lo que constituyó una comunicación fluida, entre el cantautor y quienes lo admiran y disfrutan de su música.

Para el final, después de tantas emociones, Norge aseguró que iba a terminar con un tema que había escrito hacía muy poco tiempo: Búscame adentro, nacido en 1993, y que constituye todo un emblema para el propio trovador y todo su público que lo ha seguido durante los últimos 20 años.

Al terminar el concierto, Norge aseguró a Tiempo21 que entre sus planes inmediatos está hacer una nueva gira por España para la presentación de su CD Con malos ojos, producido y mezclado en su propio estudio y con jóvenes realizadores de sonido de esta ciudad.

Benedetti era un intelectual "generoso", asegura Viglietti



MONTEVIDEO. El cantautor uruguayo Daniel Viglietti afirmó hoy que “extraña mucho” al poeta Mario Benedetti, fallecido este año y con quien compartió amistad y escenarios, a quien evocó como un ser “interior y generoso”, un “intelectual al que no se le notaba”.

La ausencia de Benedetti “es un vacío muy duro” ya que aún en los últimos tiempos “nublado por la vida, por la salud, era un referente semana a semana, siempre estaba como ese amigo fraterno que fue, era un intelectual pero no se notaba”, recordó Viglietti entrevistado hoy por radio El Espectador.

“Para mí era alguien con quien se podía ir a un boliche y hablar de cosas personales”, añadió el cantautor, amigo personal del autor de “La Tregua” fallecido el 17 de mayo a los 88 años.

“Qué lindo ser que fue Mario mas allá del poeta, narrador, ensayista, un ser interior, generoso. Lo extraño mucho”, completó el artista, quien integra además la Fundación que lleva el nombre del escritor y que se lanzó oficialmente el 14 de septiembre, cuando hubiera cumplido 89 años.

Presidida por la escritora Sylvia Lago, la Fundación -que también integra Eduardo Galeano- además de difundir la obra de Benedetti busca “extender una mano a los creadores jóvenes” de modo que la falta del poeta “no sea sólo una nostalgia o un sentimiento respetable pero demasiado individual sino que se proyecte a los demás”.

El cantautor contó además que prepara para 2010 un nuevo disco, “Canciones Humanas” que en su título evoca de alguna manera la obra “Poemas Humanos” del peruano César Vallejos.

La intención fue, añadió Viglietti, “en un mundo con tanta inhumanidad defender los aspectos más hondos del ser humano, el compañerismo, la cosa solidaria, la emoción, que está como en penitencia desde hace un tiempo”.

28 de Diciembre de 2009

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URUGUAY-BENEDETTI
Viglietti extraña al "ser interior generoso" que fue Benedetti

El cantautor uruguayo Daniel Viglietti, amigo cercano de su compatriota Mario Benedetti, con quien compartió muchos escenarios del mundo mezclando música y poesía, afirmó hoy que extraña al "ser interior generoso" que fue el escritor, fallecido este año.

Al recordar al poeta, que murió el pasado 17 de mayo a los 88 años, el cantautor hizo hincapié en que Benedetti "era un intelectual pero no se notaba". EFE/Archivo

"Es un vacío muy duro porque, sin duda, pensando en las épocas más luminosas de Mario, pero también pensando en los últimos tiempos, nublado por la vida, por la salud, era un referente semana a semana, siempre estaba como ese amigo fraterno que fue", indicó Viglietti a la emisora de radio El Espectador.

Al recordar al poeta, que murió el pasado 17 de mayo a los 88 años, el cantautor hizo hincapié en que Benedetti "era un intelectual pero no se notaba".

"Para mi era alguien con quien vos podés ir a boliche y charlar de cosas personales, tomarte un trago o un café", una bebida esta última que le encantaba, reveló. "Que lindo ser que fue Mario, más allá del poeta, el narrador, el ensayista, fue un ser interior generoso", apostilló.

Viglietti dijo que lo ha extrañado mucho en las últimas semanas, sobre todo al participar en varios homenajes al escritor en México y en Alicante (España).

El cantautor se refirió también a la Fundación Mario Benedetti, de la que forma parte como vocal, función que comparte con el escritor Eduardo Galeano, y que es presidida por la también escritora Sylvia Lago.

"Está haciendo un trabajo que ya se ha echado a andar, que va a difundir la obra de Mario, pero también va a tender una mano a los creadores jóvenes, en forma de becas, de concursos", explicó.

El objetivo es que la memoria de Benedetti (Paso de los Toros, 1920 - Montevideo, 2009) "no sea una nostalgia o un sentimiento respetable pero demasiado individual sino que se proyecte a los demás", concluyó.

El lanzamiento de la fundación se produjo el pasado 14 de septiembre, el día en que el autor de "La Tregua" (1960) hubiera cumplido 89 años.

Con una prolífica obra de más de 80 libros de poesía, relatos, novela y ensayo, Benedetti obtuvo numerosos reconocimientos internacionales como el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (1999), el Premio Iberoamericano José Martí (2001) y el Premio Internacional Menéndez Pelayo (2005).

Su última obra, el poemario "Testigo de uno mismo", fue presentada en agosto del año pasado.

Hasta su muerte, que le sobrevino en su apartamento del centro de Montevideo, estaba trabajando en un nuevo libro que tenía por título provisional "Biografía para encontrarme".

lunes, diciembre 28, 2009

Nicaragua: El FSLN y los derechos de la mujer



Karla Jacobs (TORTILLA CON SAL, especial para ARGENPRESS.info)

Entrevista con Scarlet Cuadra Waters, editora de la revista Correo.

Scarlet Cuadra Waters es una periodista originalmente de Bluefields en la Costa Caribe de Nicaragua, con 20 años de experiencia trabajando en medios alternativos. En los años 80 ella fue la editora de Barricada Internacional, la versión internacional del periódico del primer gobierno revolucionario del FSLN.

Actualmente Cuadra es la editora de la Revista Correo, una revista de la izquierda que trata temas nacionales y regionales. También es la responsable del área de comunicación para el Proyecto de Desarrollo Integral del barrio Acahualinca, un proyecto financiado por España que se trata de mejorar el nivel de vida de las familias que viven y trabajan en el basurero de Managua, La Chureca, y de mejorar las condiciones ambientales del mismo con el sellado paulatino del basurero y un mejor manejo de los deshechos sólidos.
En esta entrevista Scarlet habla de los derechos de la mujer en Nicaragua y la relación de ese tema con el FSLN dando su perspectiva sobre la política pro mujer del gobierno, la penalización del aborto terapéutico y los grupos de mujeres que hacen oposición al Frente.
* * *
Karla Jacobs: El tema del FSLN y los derechos de la mujer nicaragüense es un tema interesante que no deja de tener algunas contradicciones. Y es también un tema muy poco comprendido por sectores progresistas internacionales.
En mi opinión es una ironía que cuando más preocupación por los derechos de la mujer nicaragüense es expresado por los medios internacionales tanto corporativos como alternativos es cuando más derechos se les está cumpliendo el gobierno a las mujeres, y cuando más poder se le está cediendo a la mujer dentro del gobierno.
Tal vez esto sea resultado, además de la mala fe de algunos dueños de medios, del hecho de que la agenda pro mujer de ciertos sectores izquierdistas de los Estados Unidos y de Europa sea distinta a la agenda de las mujeres nicaragüenses.
Desde su perspectiva como mujer nicaragüense y como periodista, ¿cuáles serían los puntos claves de una política pro mujer en Nicaragua?
Scarlet Cuadra: Yo puedo entender cuando hablás de ese ojo que hay de los medios de comunicación e incluso del movimiento de mujeres internacional sobre Nicaragua. Evidentemente esto está relacionado al tema del aborto terapéutico y el derecho de la mujer a decidir.
Y sí, es un tema que está en debate, que preocupa. Yo, como mujer, me identifico plenamente con el derecho de la mujer a tener acceso al aborto, a tener el derecho de decidir sobre su cuerpo, y el derecho de decidir cuántos hijos pueda o quiera tener. Aunque no veo el aborto como un método de planificación familiar. Pero bueno, eso es otra parte de la historia, y es de lo más interesante.
Educación: la llave para el desarrollo de una sociedad en su conjunto
Pero si vos me preguntás, qué veo yo como políticas claves dirigidas hacía la mujer, yo no puedo dejar de mencionar el tema de la educación.
El énfasis que se le está dando aquí para crear oportunidades para que la población, tanto hombres como mujeres, tengan acceso a la educación, esa es la llave para el desarrollo de una sociedad pero también para un individuo.
Es la manera formal, digamos, para entrar, desarrollar y adquirir conciencia. Conciencia que es conocimiento. Si tenés información, si tenés saberes, si podés compartir tus saberes, y si otros conocen tus saberes, entonces está avanzando. El que tiene conocimiento avanza, no se estanca.
Y la política educativa [del gobierno del FSLN] es para hombres y para mujeres, pero resulta que en nuestro país las que han estado más alejadas de las aulas en el aspecto formal pero también en el aspecto informal somos las mujeres. Pero somos las mujeres las que a nivel de la familia somos la correa de transmisión de conocimiento y de información, entonces, es paradójico que somos las que hemos estado más alejadas de la sistemización del conocimiento.
Entonces cuando hablamos de que hay una política pública y que hay una voluntad política que con hechos se está demostrando, de abrir las aulas, de abrir el conocimiento, de abrir la sistematización del conocimiento a la población, resulta que las mujeres somos las más beneficiadas porque hemos sido las mujeres las más afectadas por las limitaciones de orden económica, social y cultural.
Entonces allí está la primera llave. Ahí te puedo decir que este gobierno sí está buscando equidad, sí está buscando justicia social y ha priorizado a las mujeres.
Oportunidades económicas en reconocimiento del trabajo de la mujer

Luego de esto está el tema económico que es la otra pata del banco para que te de equilibrio. Y lo que es la política económica del gobierno, ya no necesitamos ni mencionar que está dirigida fundamentalmente a apoyar a las mujeres.
En el programa del bono productivo, conocido como el Hambre Cero, dan prioridad a aquellos hogares donde la mujer es jefa de familia, y también donde no lo es. Y se le deposita poder en las manos de la mujer.
Porque la mujer siempre ha tenido la responsabilidad de llevar adelante la economía del hogar. Ahora no solamente tiene esa responsabilidad sino que, en reconocimiento de esa responsabilidad, se le está dando un instrumento de cambio, de mejoramiento que es el bono productivo - sus gallinas, sus chanchitos, su vaca, etc.
Hay gente que se ríe y se burla de este programa pero no saben el impacto que tiene en la familia saber ser poseedora de bienes que van primero por la sobrevivencia pero también que va por la gestión y producción de recursos que va a significar cambios importantes en su vida desde el nivel de la alimentación de la familia.
Ahora, hablando de la presencia de las mujeres en los cargos públicos, es una cuestión formal pero que también ayuda porque te va creando otro imagen. Incide en que los colectivos de mujeres vean a mujeres tomando decisiones, participando. Y no solamente a nivel de las esferas de gobierno sino que estamos hablando también en sus propias comunidades.
En Nicaragua la participación popular es una realidad
Por ejemplo los Consejos de Poder Ciudadano, los CPC - son eso - son puertas, son espacios de participación. Y si vas lugar por lugar te vas a dar cuenta, por lo menos yo cuando estaba trabajando más en la comunicación comunitaria, yo veía hombres y mujeres por igual pero veía las mujeres mucho más empoderadas en sus roles aquí en Managua en los barrios más pobres. Los barrios que gozan de menos beneficios sociales. Allí veía a las mujeres participando con una fuerza y una voluntad que uno dice - aquí está pasando algo. Aquí se está abriendo puertas a la participación y a la toma de decisiones. Y no está sucediendo tal vez al ritmo de que quisiéramos muchas, y muchos. Pero hay un ritmo que va ascendiendo.
Probablemente mucha gente promueve este tipo de modelo participativo pero muchas veces suena como algo teórico. Y es que en Nicaragua se está haciendo, se está poniendo en práctica. Esa es la gran diferencia. Y no es al ritmo que uno quisiera porque estamos trabajando con la realidad, porque no es solo algo anunciado en un periódico o un panfleto sino que lo estás aplicando y te encontrás con las contradicciones con que te presenta la realidad.
Entonces tenemos la voluntad manifiesta a nivel del gobierno, a nivel del partido de ir abriendo espacios de participación. Son espacios formales que de un momento a otro no solucionan, no remedian, pero creo que van cambiando el estereotipo de las relaciones de poder.
Ahora tenemos ministros que parecen al pueblo
Yo le comentaba a un amigo hace poco - fijate como este gobierno ha cambiado la cara del gobierno. Lleva un mensaje cultural y político importante. Porque ahora los ministros y las ministras ni son rubios, ni son chelitos, ni son delgaditos, ni son de fino hablar. Es que son la imagen de lo que son la gran mayoría de los y las nicaragüenses - son morenos, son indiados, no tienen palabras rebuscadas cuando conversan y cuando tratan con los periodistas o con la población.
Es decir hay una voluntad del gobierno de ir cambiando la cara del mismo gobierno, de ir acercándola más a la gente para que la gente vea en ese gobierno, un gobierno que es de ellos y que trabaja por ellos.
Y eso también hace que la gente se siente con confianza de hacer una fiscalización y también de hacer propuestas y de debatir y de consensuar.
Y ahora que el gobierno obedece la política de un porcentaje muy alto de mujeres en cargos públicos, y la mayoría de esas mujeres tiene cara popular, cara de mujer de pueblo. Este hecho contribuye de alguna manera de irnos quitando ese sentimiento que se ha generado en Nicaragua, la falta de autoestima, que uno dice - yo, a como soy, no me imagino asumiendo un cargo, tomando decisiones, debatiendo.
De repente durante estos últimos tres años se rompieron esos estereotipos de la cara europea o americanita. Y eso, sí, me demuestra que el gobierno tiene la voluntad de ir haciendo cambios.
Hay muchos avances en el campo de la salud, pero también hay deudas pendientes
Y bueno, después está el tema de salud. Yo creo que no sería justo decir que por haber penalizado el aborto terapéutico habría que estigmatizar a este gobierno, porque los avances en el campo de la salud que ha impulsado este gobierno han significado también salud para la mujer.
No manejo las cifras exactas, pero de acuerdo con las cifras del gobierno, ya hay un descenso en el índice de mortalidad materna. Entiendo que así es, y pues así tendría que ser, porque en la medida que vas llevando la atención a la población y en que mejorás la atención especial para las mujeres en general pues te tienen que ir bajando los índices de mortalidad materna.
Sí, hay deudas pendientes, hay cosas que discutir. Hay cosas que las mujeres que creen que el derecho al aborto es un derecho de las mujeres tendrán que pelear, tendrán que crear el debate y generar un estado de opinión público favorable a ese tema, tendrán que crear las condiciones, pues.
KJ: Hablando precisamente de ese tema, mi opinión personal hace tres años cuando se penalizó el aborto terapéutico fue que ya para este tiempo, o tal vez antes, se hubiera derogado esa ley. Porque la aprobación de la penalización del aborto terapéutico, yo la analizaba definitivamente como una jugada política para no perder las elecciones.
Pero desgraciadamente, hoy estamos a tres años del gobierno del Frente, y no se ha derogado esa ley. ¿Cómo analiza Usted esa situación? ¿Considera que la derogación es una prioridad para el gobierno?
SC: Yo pensaba exactamente lo mismo que vos. Que vas a sacrificar ese derecho de la mujer por una cuestión de coyuntura pero para dar avance estratégico. Pero evidentemente no es así.
Estamos en la obligación de levantar nuevamente el debate sobre el aborto
Entonces yo creo que los hombres y las mujeres que estamos dentro del Frente Sandinista que tenemos una opinión en relación al aborto terapéutico o no terapéutico estamos en la obligación de seguir luchando, de llevar este tema a la mesa del debate y no tener miedo a plantear nuestras opiniones. Estamos en la obligación a crear las condiciones para que en un momento llegue a ser aprobado nuevamente.
O sea este tema no me aleja a mí de los postulados, de la visión del Frente Sandinista ni del gobierno. Yo te digo lo que todos ya sabemos que nuestro partido es un partido donde hay propuestas, donde hay debate. Y los militantes tienen la responsabilidad de expresar y de dar a conocer sus planteamientos.
Yo he hablado con compañeras y con compañeros de la base del partido y he llegado a la conclusión que hay un sector importante que está en contra de la personalización del aborto. Hay otro sector que no tiene mayor interés en el tema. Y otro sector que está de acuerdo con la personalización. Pero no hay ningún sentido de que te van a estigmatizar porque estás planteando el aborto.
O sea que hay la suficiente libertad para hablarlo. Y yo creo que los que estamos a favor de que ese derecho - no solo de las mujeres sino de las propias familias - se recupere, estamos en la obligación de ir creando los espacios para hacer nuestros planteamientos.
Y no debemos de postergarnos, por aquello de pensar que ahorita no se puede porque en este momento hay otras cosas más importantes. En esta situación no debés esperar que se te plantean las condiciones sino que vos tenés que ir creando las condiciones para que estos temas se debaten a nivel de partido. Para que vaya creciendo de manera coherente una propuesta concreta, un planteamiento fundamentado. Y para que sea objeto de discusión a nivel del partido, de la sociedad y del gobierno.
Yo creo que hay suficientes espacios y apertura en las mentes de la militancia y de la gente que apoya al gobierno para discutir y abordar este tema. Lo que falta es crear las condiciones para que este debate lleve a una toma de decisiones. Y ahí sí, obviamente van a jugar un papel algunas condiciones de coyuntura política.
Los grupos de mujeres que hacen oposición al FSLN
KJ: Pensando en la coyuntura partidaria, porque Usted dice que considera que dentro del Frente sí existe una buena parte de la militancia que estuviera o que está a favor de promover esa propuesta de derogar la ley que penaliza el aborto, me gustaría hablar un poco del hecho de que la mayoría de los grupos que trabajan por los derechos de las mujeres - o por lo menos los grupos más visibles - no están con el Frente ...
SC: Pero no están con el gobierno no por el tema del aborto terapéutico. Desde antes han estado en contra del Frente por posiciones políticas que han llevado a esos grupos a situarse en oposición al partido al que en un momento pasado pertenecieron.
Porque lo del aborto no necesariamente te aleja. A miles de mujeres no las ha alejado del Frente. Siempre cuando abordás el tema encontrás diferentes posiciones pero de ninguna manera una exclusión o una estigmatización.
Yo creo que lo que les ha alejado a esos grupos del Frente son sus posiciones políticas, posiciones más allá del tema del aborto. Y son posiciones políticas a que tienen derecho. Ellos tienen derecho de alejarse.
Pero lo que sí me parece un abuso es que esa bandera del aborto la esgriman como que fuera la causa de su separación del Frente. Allí sí creo que hay una manipulación de muchos compañeros y compañeras. Porque la derecha está en contra del aborto terapéutico y esos grupos marchan con los partidos de derecha. Entonces el tema del aborto no los alejó de los partidos de derecha.
El hecho de que [esos grupos de mujeres] allí están con los partidos de derecha es porque hay coincidencias políticas entre sí. Porque se identifiquen entre sí.
Porque ese es el sector que de vez en cuando levanta una campaña en contra del aborto de lo más perverso y manipulador. Pero allí están esos grupos de mujeres marchando con ellos. Seguramente, aunque yo nunca les he visto, reciben financiamiento para sus campañas, comparten sus pancartas, sus camisetas.
KJ: Entonces, ¿Usted no considera que es una desventaja para el Frente el hecho de que esos grupos de mujeres, que son muy visibles .... ?

SC: Y muy inteligentes también. Porque dentro de esos grupos hay mujeres muy inteligentes y que han demostrado que están comprometidas con los derechos de la mujer, pero que por distintas razones ya están en la acera contrario.

Y sí creo que ha afectado la imagen del Frente. Y, bueno a ese nivel de decisiones yo no tengo información, pero parece que el Frente no ha tenido la voluntad de responder, o sencillamente ha optado por una estrategia de que digan lo que digan yo no voy a responder. Pero sí creo que el imagen del Frente ha sido afectado a nivel internacional.
Las que están comprometidos con la lucha del pueblo hacen falta dentro del FSLN

KJ: Hablando de la militancia del Frente, ¿Usted considera una desventaja el hecho de que esas mujeres o esos grupos no están con el partido, como para levantar ese debate sobre el aborto terapéutico?

SC: Yo distingo dos grupos. Están aquellas, que son las más visibles, que están en la palestra pública y que toda oportunidad que tienen es para atacar al proyecto político que está levantando el Frente Sandinista.

Y después están aquellas que están comprometidas con la causa de las mujeres, que creen en el derecho de la mujer de decidir, y que se han alejado del Frente pero que no se han destacado por tener una posición anti-sandinista.

Entonces en el caso de esas últimas yo creo que sí es una pena porque son compañeras y compañeros que pueden aportar mucho al debate y que son tan comprometidos que levanten su bandera a diario. Entonces sí, creo que no tenerlos dentro para la causa del derecho al aborto terapéutico es una pena. Es algo que desgasta, que te debilita. Es algo que hace falta.

Pero al otro nivel, la gente que ya tienen posiciones políticas opuestas, ¿para qué? Para qué los necesitás adentro si en todo caso irían en contra de la continuidad de la revolución que estamos llevando adelante.

Son compañeros y compañeras que te dicen - "yo, que di mi vida por la revolución, yo, que di mis horas extras ..." Entonces ¿por qué los vamos a querer tener dentro si van a estar llorando toda su vida por lo que dieron? Yo creo que esas personas hacen bien en haberse alejado y haber buscado sus propios espacios. Porque dentro no tienen nada que hacer ya.

Pero sí hay otros compañeros y compañeras, incluso algunas personas que yo conozco personalmente, que están muy dolidos por lo que están viendo en relación a ese tema y por eso han querido alejarse. Son personas que sienten que una vez más el Frente ha castigado los derechos de las mujeres por una cuestión coyuntural.

BarnaSants 2010 rendirá homenaje a Víctor Jara


Además del cantautor chileno, la Revolución Mexicana y la "Nuevísima Troba Cubana" también serán ejes temáticos del festival de cantautores (15 enero - 28 marzo)

Cartel oficial de BarnaSants 2010, obra de la uruguaya Elisa Armendáriz. Foto: Comedianet

BarnaSants 2010 rendirá homenaje a Víctor Jara
David Vilar
Barcelona, 16 de diciembre de 2009. La 15ª edición del festival de cantautores BarnaSants se estrenará el 15 de enero en el Auditori de Barcelona con un artista emergente como Cesk Freixas y se alargará hasta el 28 de marzo, con una clausura a cargo de Oscar Briz, premio Enderrock de la crítica al mejor disco de canción de autor 2008 por 'Asincronia', en el club Back Note de Valencia.

Mientras tanto, desfilarán un total de 97 artistas, con una importantísima presencia de cantautores latinoamericanos, y se homenajeará "los 50 años de la Nova Cançó, el centenario de la Revolución Mexicana, la vigencia de la Nuevísima Trova Cubana y el recuerdo de un Víctor Jara que finalmente ha recibido sepultura oficial treinta años después de su secuestro, tortura y asesinato", asegura Pere Camps, su director. El cartel oficial de esta 15ª edición del BarnaSants es obra de la artista uruguaya afincada en Barcelona Elisa Armendáriz.

Los cantautores latinoamericanos ostentarán una buena cuota de representación durante el BarnaSants 2010. Por una parte, el festival rendirá homenaje al Centenario de la Revolución Mexicana, "primera revuelta social y política del siglo XX", con la actuación de los cantautores mexicanos Paco Barrios 'El Mastuerzo', Mauricio Díaz 'El Hueso', María Inés Ochoa y León Chávez Texeiro.

Por otra parte, el certamen también homenajeará la figura del cantautor chileno Víctor Jara, con una exposición de carteles de sus conciertos que su viuda, Joan Jara, inaugurará en el Auditori Barradas de L'Hospitalet, donde el también chileno Manuel García ofrecerá un recital.

La "nuevísima Trova Cubana" estará representada con las actuaciones de La Nova Tradicional -grupo cubano afincado en Barcelona-, Julio Fowler -representante de la nueva generación de cantautores de la isla caribeña y exponente de la marginal 'Generación de los Topos'-, Santiago Feliu -que celebra 30 años de carrra con el álbum 'Ay, la vida'- y los trovadores Lien Rodríguez & Rey Pantoja.

El cartel latinoamericano se completa con los conciertos de la argentina Soledad Villamil, actriz protagonista del film 'El secreto de tus ojos', que presentará en Europa 'Morir de amor', su estreno como cantante; La BBC y los Minicomponentes, un conjunto hispano-argentino con un gran sentido del humor; el salvadoreño Franklin Quezada, que exhibirá el folklore de su país; los nicaragüenses Carlos Mejía Godoy y los de Palacaguina -símbolo de la lucha sandinista ante el general Somoza- y Perrozompopo; el argentino-costarricense Adrián Goizueta; el clásico argentino Alberto Cortez; el uruguayo Daniel Viglietti; y el grupo costarricense Malpaís.

Una programación muy variada
El cartel presenta, como siempre, una oferta bien variada, con una presencia mayoritaria de cantautores en catalán, desde Raimon hasta Lluís Gavaldà, pasando por Gerard Quintana, Quimi Portet, el valenciano Remigi Palmero, Albert Fibla, Albert Sans, Dani Flaco y Rafa Pons en una actuación conjunta, Ester Formosa, Ramon Sauló, Joanjo Bosk y Enric Hernáez, entre otros. Muchos de ellos, procedentes del País Valencià, uno de los lemas que esta nueva edición del BarnaSants lleva por 'leiv motiv'.

Marc Parrot será el protagonista del homenaje que el BarnaSants 2010 quiere rendir a la Nova Cançó con dos conciertos, en el Teatre Joventut de L'Hospitalet y en el Auditori. Bajo dirección escénica de Ramon Simó, Parrot presentará el disco '50 anys de la Nova Cançó' ('50 años de la Nova Cançó', Música Global, 2009), en el que versiona autores como Joan Manuel Serrat, Sisa, Quico Pi de la Serra, Maria del Mar Bonet y Ovidi Montllor.

Referentes del género
Con la presencia de Víctor Manuel, Pedro Guerra, Alfonso Villalonga, Javier Krahe, Javier Ruibal y Luis Eduardo Aute, que presenta el espectáculo 'Auteclàssic' con el catalán Joan Isaac, tampoco faltarán los grandes clásicos del género canción de autor. La música vasca también estará representada con Jabier Muguruza, uno de los mejores compositores estatales, que presenta su último trabajo, 'Taxirik Ez', y Benito Lertxundi.

De entre el resto de actuaciones programadas destacan el leonés Fabián, el crooner andaluz Zenet, el aragonés Labordeta, el madrileño Francisco Espinosa, Rebeca Jiménez, el andaluz Juan Trova, los madrileños Marwan y Luis Ramiro, el Toti Soler Trio, Patxi Andion, Coque Malla, el aragonés Angel Petisme, Mª Dolores Pradera y la portuguesa Maria de Medeiros, que además de actriz también ejerce como cantautora y que interpretará una recopilación de temas de resistencia a la dictadura brasileña.

Por último, destacar los cantautores italianos que, fruto de la colaboración con el Club Tenco del Recital de San Remo, desfilarán por el BarnaSants 2010 como Maria Pierantoni Giua, Gianmaria Testa y Roberto Vecchioni.

Premios propios y recital infantil
Una de las novedades de esta edición de Barnasants 2010 es la inauguración de unos premios propios: el Premio de Canción de Autor, que elegirá cada año la tarea y la trayectoria de un cantautor, y el Premio al Activismo Cultural, que reconoce iniciativas comprometidas con la cultura.

Otra novedad que incorporará el festival de cantautores, que para esta edición incorporará seis escenarios más, es un recital dirigido al público infantil con "la voluntad de poner en marcha una línea estable de programación dirigida a niños y niñas" y que homenajeará la figura de Xesco Boix en el 26º aniversario de su muerte.

+ info: BarnaSants 2010

(*) Cartel oficial del BarnaSants 2010, obra de Elisa Armendáriz (Uruguay, 1970).


http://www.tribunalatina.com/es/notices/barnasants_2010_rendira_homenaje_a_victor_jara_22335.php

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Discurso al recibir el doctorado honoris causa de la Universidad Central de las Villas (28 de diciembre de 1959)


Referencia al artículo: AQUEL GUERRILLERO, PEDAGOGO
Y DOCTOR HONORIS CAUSA –

Queridos compañeros, nuevos colegas del Claustro y viejos colegas de la lucha por la libertad de Cuba: tengo que puntualizar como principio de estas palabras que solamente acepto el título que hoy se me ha conferido, como un homenaje general a nuestro ejército del pueblo. No podría aceptarlo a título individual por la sencilla razón de que todo lo que no tenga un contenido que se adapte solamente a lo que quiere decir, no tiene valor en la Cuba nueva; y cómo podría aceptar yo personalmente, a título de Ernesto Guevara, el grado de Doctor Honoris Causa de la Facultad de Pedagogía, si toda la pedagogía que he ejercido ha sido la pedagogía de los campamentos guerreros, de las malas palabras, del ejemplo feroz, y creo que eso no se puede convertir de ninguna manera en un toga; por eso sigo con mi uniforme del Ejército Rebelde aunque puedo venir a sentarme aquí, a nombre y representación de nuestro ejército, dentro del Claustro de Profesores. Pero al aceptar esta designación, que es un honor para todos nosotros, quería también venir a dar nuestro homenaje, nuestro mensaje de ejército del pueblo y de ejército victorioso.

Una vez a los alumnos de este Centro les prometí una pequeña charla en la que expusiera mis ideas sobre la función de la Universidad; el trabajo, el cúmulo de acontecimientos, nunca me permitió hacerlo, pero hoy voy a hacerlo, amparado ahora, además, en mi condición de Profesor Honoris Causa.

Y, ¿qué tengo que decirle a la Universidad como artículo primero, como función esencial de su vida en esta Cuba nueva? Le tengo que decir que se pinte de negro, que se pinte de mulato, no sólo entre los alumnos, sino también entre los profesores; que se pinte de obrero y de campesino, que se pinte de pueblo, porque la Universidad no es el patrimonio de nadie y pertenece al pueblo de Cuba, y si este pueblo que hoy está aquí y cuyos representantes están en todos los puestos del Gobierno, se alzó en armas y rompió el dique de la reacción, no fue porque esos diques no fueron elásticos, no tuvieron la inteligencia primordial de ser elásticos para poder frenar con esta elasticidad el impulso del pueblo, y el pueblo que ha triunfado, que está hasta malcriado en el triunfo, que conoce su fuerza y se sabe arrollador, está hoy a las puertas de la Universidad, y la Universidad debe ser flexible, pintarse de negro, de mulato, de obrero, de campesino, o quedarse sin puertas, y el pueblo la romperá y él pintará la Universidad con los colores que le parezca.

Ese es el mensaje primero, es el mensaje que hubiera querido decir los primeros días después de la victoria en las tres Universidades del país, pero que solamente pude hacer en la Universidad de Santiago, y si me pidieran un consejo a fuer de pueblo, de Ejército Rebelde y de profesor de Pedagogía, diría yo que para llegar al pueblo hay que sentirse pueblo, hay que saber qué es lo que quiere, qué es lo que necesita y qué es lo que siente el pueblo. Hay que hacer un poquito de análisis interior y de estadística universitaria y preguntar cuántos obreros, cuántos campesinos, cuántos hombres que tienen que sudar ocho horas diarias la camisa están aquí en esta Universidad, y después de preguntarse eso hay que preguntarse también, recurriendo al autoanálisis, si este Gobierno que hoy tiene Cuba representa o no representa la voluntad del pueblo. Y si esa respuesta fuera afirmativa, si realmente este Gobierno representa la voluntad del pueblo, habría que preguntarse también: este Gobierno que representa la voluntad del pueblo en esta Universidad, ¿dónde está y qué hace? Y entonces veríamos que desgraciadamente el Gobierno que hoy representa la mayoría casi total del pueblo de Cuba no tiene voz en las universidades cubanas para dar su grito de alerta, para dar su palabra orientadora, y para expresarlo sin intermedios, la voluntad, los deseos y la sensibilidad del pueblo.

La Universidad Central de Las Villas dio un paso al frente para mejorar estas condiciones y cuando fue a realizar su forum sobre la Industrialización, recurrió, sí, a los industriales cubanos, pero recurrió al Gobierno también, nos preguntó nuestra opinión y la opinión de todos los técnicos de los organismos estatales y paraestatales, porque nosotros estamos haciendo -lo podemos decir sin jactancia- en este primer año de la Liberación, mucho más de lo que hicieron los otros gobiernos, pero además, mucho más de lo que hizo eso que pomposamente se llama la «libre empresa», y por eso como Gobierno tenemos derecho a decir que la industrialización de Cuba, que es consecuencia directa de la Reforma Agraria, se hará por y bajo la orientación del Gobierno Revolucionario, que la empresa privada tendrá, naturalmente, una parte considerable en esta etapa de crecimiento del país, pero quien sentará las pautas será el Gobierno, y lo será por méritos propios, lo será porque levantó esa bandera respondiendo quizás al impulso más íntimo de las masas, pero no respondiendo a la presión violenta de los sectores industriales del país. La industrialización y el esfuerzo que conlleva es hijo directo del Gobierno Revolucionario, por eso lo orientará y lo planificará. De aquí han desaparecido para siempre los préstamos ruinosos del llamado Banco de Desarrollo, por ejemplo, que prestaba 16 millones a un industrial y este ponía 400 mil pesos, y estos son datos exactos, y esos 400 mil pesos no salían tampoco de su bolsillo, salían del 10 por ciento de la comisión que le daban los vendedores por la compra de las maquinarias, y ese señor que ponía 400 mil pesos cuando el Gobierno había puesto 16 millones, era el dueño absoluto de esa empresa y como deudor del Gobierno, pagaba plazos cómodos y cuando le conviniera. El Gobierno salió a la palestra y se niega a reconocer ese estado de cosas, reclama para sí esa empresa que se ha formado con el dinero del pueblo y dice bien claro que si la «libre empresa» consiste en que algunos aprovechados gocen del dinero completo de la nación cubana, este Gobierno está contra la «libre empresa», siempre que esté supeditada a una planificación estatal, y como hemos entrado ya en este escabroso terreno de la planificación, nadie más que el Gobierno Revolucionario que planifica el desarrollo industrial del país de una punta a la otra, tiene derecho a fijar las características y la cantidad de los técnicos que necesitará en un futuro para llenar las necesidades de esta nación, y por lo menos debe oírse al Gobierno Revolucionario cuando dice que necesita nada más que determinado número de abogados o de médicos, pero que necesita cinco mil ingenieros y 15 mil técnicos industriales de todo tipo, y hay que formarlos, hay que salir a buscarlos, porque es la garantía de nuestro desarrollo futuro.

Hoy estamos trabajando con todo el esfuerzo por hacer de Cuba una Cuba distinta, pero este profesor de Pedagogía que está aquí no se engaña y sabe que de profesor de Pedagogía tiene tanto como de Presidente del Banco Central, y que si tiene que realizar una u otra tarea es porque las necesidades del pueblo se lo demandan, y eso no se hace sin sufrimiento mismo para el pueblo, porque hay que aprender en cada caso, hay que trabajar aprendiendo, hay que hacer borrar al pueblo el error, porque uno está en un puesto nuevo, y no es infalible, y no nació sabiendo, y como este Profesor que está aquí fue un día médico y por imperio de las circunstancias tuvo que tomar el fusil, y se graduó después de dos años como comandante guerrillero, y se tendrá luego que graduar de Presidente de Banco o Director de Industrialización del país, o aún quizás de profesor de Pedagogía, quiere este médico, comandante, presidente y profesor de Pedagogía, que se prepare la juventud estudiosa del país, para que cada uno en el futuro inmediato, tome el puesto que le sea asignado, y lo tome sin vacilaciones y sin necesidad de aprender por el camino, pero también quiere este profesor que está aquí, hijo del pueblo, creado por el pueblo, que sea este mismo pueblo el que tenga derecho también a los beneficios de la enseñanza, que se rompan los muros de la enseñanza, que no sea la enseñanza simplemente el privilegio de los que tienen algún dinero, para poder hacer que sus hijos estudien, que la enseñanza sea el pan de todos los días del pueblo de Cuba.

Y es lógico; no se me ocurriría a mí exigir que los señores profesores o los señores alumnos actuales de la Universidad de Las Villas realizaran el milagro de hacer que las masas obreras y campesinas ingresaran en la Universidad. Se necesita un largo camino, un proceso que todos ustedes han vivido, de largos años de estudios preparatorios. Lo que sí pretendo, amparado en esta pequeña historia de revolucionario y de comandante rebelde, es que comprendan los estudiantes de hoy de la Universidad de Las Villas que el estudio no es patrimonio de nadie, y que la Casa de Estudios donde ustedes realizan sus tareas no es patrimonio de nadie, pertenece al pueblo entero de Cuba, y al pueblo se la darán o el pueblo la tomará, y quisiera, porque inicié todo este ciclo en vaivenes de mi carrera como universitario, como miembro de la clase media, como médico que tenía los mismos horizontes, las mismas aspiraciones de la juventud que tendrán ustedes, y porque he cambiado en el curso de la lucha, y porque me he convencido de la necesidad imperiosa de la Revolución y de la justicia inmensa de la causa del pueblo, por eso quisiera que ustedes, hoy dueños de la Universidad, se la dieran al pueblo. No lo digo como amenaza para que mañana no se la tomen, no; lo digo simplemente porque sería un ejemplo más de los tantos bellos ejemplos que se están dando en Cuba, que los dueños de la Universidad Central de Las Villas, los estudiantes, la dieran al pueblo a través de su Gobierno Revolucionario. Y a los señores profesores, mis colegas, tengo que decirles algo parecido: hay que pintarse de negro, de mulato, de obrero y de campesino; hay que bajar al pueblo, hay que vibrar con el pueblo, es decir, las necesidades todas de Cuba entera. Cuando esto se logre nadie habrá perdido, todos habremos ganado y Cuba podrá seguir su marcha hacia el futuro con un paso más vigoroso y no tendrá necesidad de incluir en su Claustro a este médico, comandante, presidente de Banco y hoy profesor de pedagogía que se despide de todos.

Ernesto Che Guevara de la Serna - argentino

Las preguntas en la literatura de Edgar Borges (El por qué de los quién mató a…)



Javier Farto (Desde España. Colaboración para ARGENPRESS CULTURAL)

Con cierta frecuencia Edgar Borges (Caracas 1966) utiliza ciertos elementos de la novela negra, pero lo cierto es que tiende a la transgresión del género. Podríamos decir que todo comenzó en la Grecia Clásica, pero eso sería aventurarnos demasiado (sí es cierto que el drama de Sófocles “Edipo Rey” contiene un asesinato, pero también lo es que carece completamente de misterio). Por lo tanto, la consideremos un elemento precursor, de la misma forma que, ya más cercanas, consideramos a las novelas de aventuras del siglo XIX. Lo cierto es que las habilidades físicas de los protagonistas comienzan a ser sustituidas por capacidades intelectuales.

Diremos que Edgar Allan Poe fue el primero. Está aceptado que su obra “Los crímenes de la calle Morgue” constituye el nacimiento del género. Por primera vez, la narración sigue, no la secuencia temporal de los hechos, sino la de su descubrimiento. En este proceso de “resolución”, el lector va a ir poco a poco uniendo elementos, juntando los cabos sueltos que le proporciona el detective protagonista (Dupin en Edgar Allan Poe, Holmes en Arthur Conan Doyle, Poirot o Miss Marple en Agatha Christie), sin cuya extraodinaria y racional ayuda el descubrimiento se antoja imposible. Tenemos ya un misterio, y un detective para desentrañarlo. De este detective podríamos decir que vive fuera del mundo, ya que en la mayor parte de los casos utiliza puramente su intelecto para resolver el crimen (rara vez baja al terreno de lo puramente físico, de la violencia contra el criminal). A la manera de Mann (que tan bien plantea el conflicto entre vida y arte) el detective es un artista. Para tareas mundanas ya tenemos a sus acompañantes: un ayudante, incapaz y que constituye una especie de nexo con el lector,. El ayudante establece con éste una dialéctica, a veces casi platónica (ya que es el detective el que en todo momento guía el diálogo y sus conclusiones, conclusiones que llegarán al lector a través de este ayudante). No podía faltar la policía, también inoperante en lo que a la resolución del problema se refiere y reducida a actividades puramente físicas: se encargará de ir al lugar del crimen, indagar inicialmente en el problema (demostrando su incapacidad) y en muchas ocasiones, se encargará de la detención final, reafirmando la idea de que el detective está alejado de lo físico.

Con el tiempo se fue produciendo un acercamiento de este personaje al mundo, así como un cierto descreimiento en cuanto a la resolución del misterio únicamente por habilidades puramente deductivas (herencia de un positivismo que todo lo cifraba en la razón). El detective se hace humano; une a sus capacidades deductivas (no siempre gigantescas) sus propias virtudes y defectos, y cierto elemento emocional comienza a tomar forma. El interés ya empieza a desplazarse; no está sólo en descubrir el misterio que rodea a un crimen; está también en comprobar como son las gentes que viven en ese mundo criminal. Ahora el ambiente comienza a cobrar importancia: un ambiente que en la mayor parte de los casos es duro y así deforma al detective, al que vuelve violento en muchas ocasiones. Además de descubrir al criminal, hay que superarlo, no verse arrastrado por su modus vivendi. Tanta victoria es la detención como conseguir conservar un atisbo de ética (aunque sea muy personal, muy propia) en un entorno hostil. El detective no puede estar ya ajeno al mundo, pero no puede rebasar tampoco una línea (necesita seguir un límite).

En ¿Quién mató a mi madre? (Ediciones Irreverentes. Madrid 2008) Edgar Borges explora a una persona, ya muerta, indaga sobre su identidad. Van a ser un libro y entrevistas con los dos hijos de la víctima los que usaran los detectives para tratar de echar luz sobre el asunto. La resolución del misterio se mezclará con una indagación de la identidad en la víctima (problema casi obsesivo en la literatura de Edgar Borges). El autor plasma aquí una serie de tesis casi estructuralistas (recordamos al recientemente fallecido Claude Lévi-Strauss): sólo podremos conocer a la Madre muerta a través de las relaciones con el resto de su familia, ella forma parte de esa estructura y sólo en ella la podemos conocer. El problema será que la visión individual de cada hijo no podrá ser más diferente (debido a la diferencia existente en el “ideal” de persona entre ambos). Así veremos a la madre como un ser excelso que odia lo vulgar, lo cotidiano, o bien como un ser odioso, precisamente por esa pretensión continuada de ser genial, de amar lo extraño, lo inverosímil. El contraste con la figura del padre, en este caso una persona muy convencional, se muestra entonces muy claro, e inundará toda la obra como una clásica lucha gnóstica entre bien y mal (pero la identificación variará según el hijo que hable). La madre y el padre serán personajes que nunca se harán presentes. Serán conocidos estrictamente por el testimonio de otros.

Especialmente interesantes se presentan las entrevistas y la presentación de escenarios. Como en la obra posterior del mismo autor (recordemos ¿Quién mató al doble de Edgar Allan Poe? Grup Lobher Barcelona 2009) se presenta aquí un escenario que recuerda al teatro: es mínimo y por ello, vital.

La acción transcurre en una casa, y diríamos mejor que en la mayor parte de la historia, en una parte de la misma, una parte mínima y donde Edgar Borges presenta una serie muy escasa (e imprescindible a mi juicio) de elementos, que son altamente significativos y simbólicos. Entre todos ellos se destaca una pequeña biblioteca, que resultará fundamental para el desarrollo de la trama. En torno a la misma crece la figura de la madre, del padre, de los hijos, de los libros escritos por la familia, de los detectives. Aquella biblioteca (apenas una estantería) es un espacio generador de esta narración, casi (simbólicamente) de la literatura en sí.

Gran parte de lo demás es espacio vacío. De vez en cuando sabemos que algo está ocurriendo fuera de nuestro alcance (escuchamos sonidos) como si estuviésemos en una obra de teatro que pretendiese romper la cuarta pared, la del público, sugiriendo que hay una historia que discurre más allá de la historia misma, una especie de metahistoria. Como hay espacio vacío, también hay espera, un tiempo vacío que se sugiere al hablar de la cantidad de entrevistas que los detectives van a realizar, La idea de que todas ellas son necesarias para la resolución. Mientras no se finalice, toda acción ajena a la historia va a ser suspendida, eliminado cualquier atisbo de vida normal fuera de la resolución del problema: los personajes no viven, sólo tratan de resolver el misterio.

Lo intentarán, y verán que no podrán. Jorge Luis Borges habló de la historia como creación literaria y, por tanto, de una cierta creación de la vida en sí. Edgar Borges sigue la línea: aquí los derroteros vitales están indisolublemente unidos a la literatura (ésta es, por tanto, un ente creador). Y si la literatura es fuente de vida, también lo es de locura; la locura que se manifiesta en esos personajes Beckettianos que siempre parecen resueltos a esperar un poco más; esperar por el fin de un proceso que, como el de Kafka no lo tiene; esperar, en definitiva, condenados a ser siempre unos observadores del pasado de su madre muerta: ¿conseguirán algún día la redención?

Javier Farto es escritor y crítico literario de España.

Estas navidades siniestras



viernes 25 de diciembre de 2009
Gabriel García Márquez

Ya nadie se acuerda de Dios en Navidad. Hay tanto estruendo de cornetas y fuegos de artificio, tantas guirnaldas de focos de colores, tantos pavos inocentes degollados y tantas angustias de dinero para quedar bien por encima de nuestros recursos reales que uno se pregunta si a alguien le queda un instante para darse cuenta de que semejante despelote es para celebrar el cumpleaños de un niño que nació hace 2.000 años en una caballeriza de miseria, a poca distancia de donde había nacido, unos mil años antes, el rey David. 954 millones de cristianos creen que ese niño era Dios encarnado, pero muchos lo celebran como si en realidad no lo creyeran. Lo celebran además muchos millones que no lo han creído nunca, pero le gusta la parranda, y muchos otros que estarían dispuestos a voltear el mundo al revés para que nadie lo siguiera creyendo. Sería interesante averiguar cuántos de ellos creen también en el fondo de su alma que la Navidad de ahora es una fiesta abominable, y no se atreven a decirlo por un prejuicio que ya no es religioso sino social.

Lo más grave de todo es el desastre cultural que estas Navidades pervertidas están causando en América Latina. Antes, cuando solo teníamos costumbres heredadas de España, los pesebres domésticos eran prodigios de imaginación familiar. El niño Dios era más grande que el buey, las casitas encaramadas en las colinas eran más grande que la virgen, y nadie se fijaba en anacronismos: el paisaje de Belén era completado con un tren de cuerda, con un pato de peluche más grande que un león que nadaba en el espejo de la sala, o con un agente de tránsito que dirigía un rebaño de corderos en una esquina de Jerusalén. Encima de todo se ponía una estrella de papel dorado con una bombilla en el centro, y un rayo de seda amarilla que habría de indicar a los Reyes Magos el camino de la salvación. El resultado era más bien feo, pero se parecía a nosotros, y desde luego era mejor que tantos cuadros mal copiados del aduanero Rousseau.

La mistificación empezó con la costumbre de que los juguetes no los trajeron los Reyes Magos -como sucede en España con toda razón-, sino el niño Dios. Los niños nos acostábamos más temprano para que los regalos llegaran pronto, y éramos felices oyendo las mentiras poéticas de los adultos. Sin embargo, yo no tenía más de cinco años cuando alguien en mi casa decidió que ya era tiempo de revelarme la verdad. Fue una desilusión no solo porque yo creía de veras que era el niño Dios quien traía los juguetes, sino también porque hubiera querido seguir creyéndolo. Además, por pura lógica de adulto, pensé entonces que también los otros misterios católicos eran inventados por los padres para entretener a los niños, y me quedé en el limbo. Aquel día -como decían los maestros jesuitas en la escuela primaria- perdía la inocencia, pues descubrí que tampoco a los niños los traían las cigüeñas de París, que es algo que todavía me gustaría seguir creyendo para pensar más en el amor y menos en la píldora.

Todo aquello cambió en los últimos treinta años, mediante una operación comercial de proporciones mundiales que es al mismo tiempo una devastadora agresión cultural. El niño Dios fue destronado por el Santa Claus de los gringos y los ingleses, que es el mismo Papá Noel de los franceses, y a quienes todos conocemos demasiado. Nos llegó con todo: el trineo tirado por un alce, y el abeto cargado de juguetes bajo una fantástica tempestad de nieve. En realidad, este usurpador con nariz de cervecero no es otro que el buen San Nicolás, un santo al que yo quiero mucho y porque es el de mi abuelo el coronel, pero que no tiene nada que ver con la Navidad, y mucho menos con la Nochebuena tropical de la América Latina. Según la leyenda nórdica, San Nicolás reconstruyó y revivió a varios escolares un oso que había descuartizado en la nieve, y por eso lo proclamaron el patrón de los niños. Pero su fiesta se celebra el 6 de diciembre y no el 25. La leyenda se volvió institucional en las provincias germánicas del Norte a fines del siglo XVIII, junto al árbol de los juguetes, y hace poco más de cien años pasó a Gran Bretaña y Francia. Luego pasó a Estados Unidos, y estos nos lo mandaron para América Latina, con toda una cultura de contrabando: la nieve artificial, las candilejas de colores, el pavo relleno y estos quince días de consumismo frenético al que muy pocos nos atrevemos a escapar. Con todo, tal vez lo más siniestro de estas Navidades de consumo sea la estética miserable que trajeron consigo: esas tarjetas postales indigentes, esas ristras de foquitos de colores, esas campanitas de vidrio, esas coronas de muérdago colgadas en el umbral, esas canciones de retrasados mentales que son los villancicos traducidos del inglés; y tantas otras estupideces gloriosas para las cuales ni siquiera valía la pena de haber inventado la electricidad.

Todo eso, en torno a la fiesta más espantosa del año. Una noche infernal en que los niños no pueden dormir con la casa llena de borrachos que se equivocan de puerta buscando donde desaguar, o persiguiendo a la esposa de otro que acaso tuvo la buena suerte de quedarse dormido en la sala. Mentira: no es una noche de paz y amor, sino todo lo contrario. Es la ocasión solemne de la gente que no se quiere. La oportunidad providencial de salir por fin de los compromisos aplazados por indeseables: la invitación al pobre ciego que nadie invita, a la prima Isabel que se quedó viuda hace quince años, a la abuela paralítica que nadie se atreve a mostrar. Es la alegría por decreto, el cariño por lástima, el momento de regalar porque nos regalan, y de llorar en público sin dar explicaciones. Es la hora feliz de que los invitados se beban todo lo que sobró de la Navidad anterior: la crema de menta, el licor de chocolate, el vino de plátano. No es raro, como sucede a menudo, que la fiesta termine a tiros. Ni es raro tampoco que los niños -viendo tantas cosas atroces- terminen por creer de veras que el niño Jesús no nació en Belén, sino en Estados Unidos.

Gabriel García Márquez. Colombiano. Escritor. Premio Nobel de Literatura en 1982.

sábado, diciembre 19, 2009

Un clásico de Bob Dylan



Margarita Schultz (Especial para ARGENPRESS CULTURAL)

Se ha escrito mucho sobre esta ‘canción de protesta’, y seguramente existen otros poemas, otros textos, otras canciones que tratan de esos mismos temas. Entonces ¿dónde puede estar la magia en continuo renacimiento de ‘Blowin in the wind’? Van aquí algunas reflexiones…

Blowin' In The Wind
Volando en el viento

How many roads must a man walk down
Before you call him a man?
¿Cuántos caminos debe recorrer un hombre
Antes de que lo llames ‘un hombre’?

Yes, 'n' how many seas must a white dove sail
Before she sleeps in the sand?
Sí, y ¿cuántos mares debe sobrevolar una paloma blanca
Antes de que duerma sobre la arena?

Yes, 'n' how many times must the cannon balls fly
Before they're forever banned?
Sí, y ¿cuántas veces deben volar las balas de cañón
Antes de que sean prohibidas para siempre?

The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.
La respuesta, amigo mío, está volando en el viento
La respuesta está volando en el viento.

How many years can a mountain exist
Before it's washed to the sea?
¿Cuántos años ha de existir una montaña
Antes de que sea arrastrada hacia el mar?

Yes, 'n' how many years can some people exist
Before they're allowed to be free?
Sí, y ¿cuántos años han de existir algunas personas
Antes de que se les permita ser libres?

Yes, 'n' how many times can a man turn his head,
Pretending he just doesn't see?
Sí, y ¿cuántas veces puede un hombre voltear su cabeza
Fingiendo que no ha visto?

The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.
La respuesta, amigo mío, está volando en el viento
La respuesta está volando en el viento.

How many times must a man look up
Before he can see the sky?
¿Cuántas veces debe un hombre mirar hacia lo alto
Antes de que pueda ver el cielo?

Yes, 'n' how many ears must one man have
Before he can hear people cry?
Sí, y ¿cuántos oídos debe tener un hombre
Antes de que pueda oír a la gente llorar?

Yes, 'n' how many deaths will it take till he knows
That too many people have died?
Sí, y ¿cuantas muertes tendrán que ocurrir hasta que sepa
Que demasiada gente ha muerto?

The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.
La respuesta, amigo mío, está volando en el viento
La respuesta está volando en el viento.



Copyright ©1962; renewed 1990 Special Rider Music
http://www.goear.com/listen/d060553/Blowin-In-The-Wind-bob-dylan

Este texto de Bob Dylan tiene su música, también compuesta por el cantautor.

Es tan fluida la melodía que envuelve el conjunto en un sin fin, y podemos oírla una y otra vez como un mantra. Su guitarra (y su armónica en un pasaje interludio) acompañan el canto dando al total una atmósfera ‘folk’ … dulcemente rústica. La forma es sencilla: una frase musical articulada como pregunta en dos semifrases finaliza en el inicio del compás 16 y un estribillo, compuesto en una armonía de respuesta que inicia en el último tiempo del mismo compás 16 y termina en el compás 24 de una manera conclusiva. Sí, es una melodía de fisonomía ‘infantil’ por su sencillez… y podría pertenecer a una canción de niños. Existen versiones diferentes que instalan la melodía en distintas tonalidades y con transcripciones desde guitarra, para piano, flauta…

Una de las más atractivas versiones del mismo Dylan, a mi juicio, puede escucharse en:

http://www.goear.com/listen/d060553/Blowin-In-The-Wind-bob-dylan


Pero, en lo relativo a la poesía de esa canción… posee una carga significativa que penetra el ánimo de manera nada infantil. Pese a la variedad de los temas que recorre Dylan en este poema, hay algo muy potente que une los diferentes dísticos. Se estructura de este modo: cuántas veces antes de que, o más brevemente: cuánto, antes… antecedente y consecuente.

El contenido de esa estructura reiterada a lo largo del texto de la canción es, ante todo, una recriminación a la indiferencia… y, consecuentemente, una recriminación a la insensibilidad. Porque la actitud a la que apunta Dylan no es la de una conciencia de los problemas como efecto de la acumulación de situaciones que conducen a reflexionar (de allí sus preguntas: …¿cuántas veces? ¿cuántos?). Dylan se dirige a la conciencia humana como una actitud, un comportamiento específico, una base ética previa a la acumulación de situaciones, más aún, previa al suceso mismo. Es la ética basal de la responsabilidad social.

Examinemos los protagonistas de esos dísticos poéticos:

el hombre, la paloma, las balas de cañón, la montaña, la libertad, el sufrimiento humano, las muertes por acciones violentas, el llanto, el cielo, la conciencia… no importa qué, en verdad: respira en cada caso un llamado a la paz, a la compasión, al reconocimiento de la belleza de la naturaleza.

Stevie Wonder, en uno de sus recitales recientes habló de la actualidad desdichada de esa canción. Porque en cada década que transcurre, desde que se la compuso (en los inicios de los ’60) hasta hoy, se han producido catástrofes originadas en lo humano (¿o lo inhumano?), las que han puesto su contenido desafortunadamente al día. Y se siguen produciendo…

http://www.youtube.com/watch?v=5Q-owh9pkSc&feature=fvw


¿Por qué esa poesía de la canción nos interpela nos llama y nos sujeta junto a ella de ese modo conmovedor?

Una parte de la responsabilidad quiero asignarla especialmente al estribillo, que nos compromete en tanto que hermanos de conciencia (en una forma del vocativo: the answer, my friend; la respuesta, amigo mío). Compromete también al viento, a la atmósfera que nos rodea. Es la atmósfera, invisible pero de una presencia contundente: (the answer is blowin in the wind, la respuesta vuela, está, en el viento).


No es necesario ir a buscarla, ni esperarla años, tampoco estudiarla… La respuesta nos rodea, fluye sin fronteras ni bordes, en el viento, con el viento, por lo mismo nos pone como humanidad nuevamente hoy frente al espejo.


Margarita Schultz es argentina residente en Chile.

Juan Gelman, hacia el sur

Daniela Saidman (Desde Venezuela. Colaboración para ARGENPRESS CULTURAL)

La poesía no se hace sola, no la escriben los poetas encerrados en sus soledades, sino que es más bien, voz y verso de todos. Son ecos de los ecos, de los tiempos idos y de los bares, de las calles, de las plazas, de los sueños. Así son precisamente los versos de Juan Gelman (Buenos Aires, mayo de 1930), ese poeta que sabe de torturas, de desapariciones, de exilios, de luchas y de esperanzas. En él, en sus palabras que esgrimen el canto y el fusil, cabe la América mayúscula, la que duele y resuella la siembra y la sangre. Gelman poeta imprescindible de estas tierras y estas gentes, poeta que a viva voz denuncia el miedo y el atropello, la pérdida y la memoria, escribe y canta el poema, escribiéndonos y cantándonos las risas y los llantos.

“A este oficio me obligan los dolores ajenos, / las lágrimas, los pañuelos saludadores, / las promesas en medio del otoño o del fuego, / los besos del encuentro, los besos del adiós, / todo me obliga a trabajar con las palabras, con la sangre”
(Arte poética, fragmento)

Se trata de resistir, a la muerte, al odio y sobre todo al olvido. Resistir, resistiendo juntos, amando en los odios y en las desgarraduras del alma. A Gelman le asesinó la dictadura lo más hondo de sus entrañas y siguió resistiendo, aunque un poco más muerto. Trataron de acallarlo y su silencio estalló en todas las esquinas, desempolvando las sombras con las que incendiaron el Sur. Por eso su palabra es siempre presente y es grito y faro y es nomeolvides.

“Sentado al borde una silla desfondada, / mareado, enfermo, casi vivo, / escribo versos previamente llorados por la ciudad donde nací. / Hay que atraparlos, también aquí / nacieron hijos dulces míos / que entre tanto castigo te endulzan bellamente. / Hay que aprender a resistir. / Ni a irse ni a quedarse, / a resistir, / aunque es seguro / que habrá más penas y olvido”.
(Mi Buenos Aires querido)

Gelman interroga con sus versos y las respuestas son las lecturas que cada quien y cada cual hace de sus palabras. Y porque calla la certeza es que despierta la duda en cada página. Son sus poemas un viaje al sur, al sur de América y a América del Sur, donde anidan los cóndores y las altas cordilleras. Su poética es la del combatiente que no ha perdido jamás la ternura y se entrega con la hondura de todas las humanas pasiones.

“te escribo en una hojita de papel / caída del cuaderno del hijo / con una baca un vurro / sumas restas / esta carta que enviaré jamás / tiene delicias y tristezas / y cuando la leías te ponías muy dulce / porque yo no escribía nada / pero cantaban los pájaros / azules de la izquierda / volaban a tu sombra y callaban / con los ojos abiertos / como memorias en la noche”.
(Carta)

El amor con todos sus nombres aparece en los versos del poeta argentino. Es la mujer con nombre de patria, de tierra olorosa al campo y a la labranza, a la ciudad y sus recovecos y a los ecos del alma. Cada vértice, cada cóncavo sentimiento emerge de las fronteras, la de la piel y la de los mapas.

“ya que navegas por mi sangre y conoces mis límites y me despiertas en la mitad del día para acostarme en tu recuerdo y eres furia de mí paciencia para mí dime qué diablos hago por qué te necesito quién eres muda sola recorriéndome razón de mi pasión por qué quiero llenarte solamente de mí y abarcarte acabarte mezclarme en tus huesitos y eres única patria contra las bestias el olvido”
(Preguntas)
Es el poeta y el poema un gesto, una caricia, un batir de alas, una mañana, una duda, la sombra, la noche, la tregua, la mirada. Poesía que sabe mostrar y mostrarse abierta al recuerdo y a las entrañas, la voz de Gelman es voz del sur que aún reclama.