jueves, mayo 01, 2008

Carta al Niño Jesús

Carta al Niño Jesús
Texto: Vidal Chávez López

Querido Niño Jesús:



La presente es para pedirte que me traigas como regalo de Navidad dos cosas: una toga y un birrete. Como considero que debes estar asombrado ante mi extravagante solicitud, te explico que utilizaré el regalo para graduarme vía express como Nixon Moreno. Por si acaso, te aclaro que yo me porto bien y no estoy imputado por la justicia venezolana.

Como tú estás muy cerca de ellos, te pido que hables directamente con el Nuncio Apostólico en Venezuela, Giacinto Berlocco, y el arzobispo de Mérida, monseñor Baltasar Porras, para que organicen mi graduación el Día de Reyes, es decir el próximo 6 de enero.

Recuérdales que faltan pocos días para celebrar ese acontecimiento y que además serán los padrinos de mi graduación. Mis invitados especiales son los rectores de las universidades de los Andes, Lester Rodríguez, y de la Simón Bolívar, Benjamín Scharifker.

Por cierto que el ministro del Poder Popular para la Educación Superior, Luis Acuña, debe darles como regalo de Navidad el Premio Innovación Universitaria del Año, ya que demostraron capacidad creativa y actitud transformadora al graduar al bachiller Moreno sin completar los requerimientos académicos exigidos por la Ley para optar a un título universitario.

Te das cuenta que no estoy pidiéndote un regalo del otro mundo, sino un obsequio que ya es algo común y corriente en la llamada Venezuela de la impunidad. Para redondear mi regalo, ponte de acuerdo con todos los canales oposicionistas para transmitir en vivo y directo mi graduación.

No pienses y digas que todavía soy un niño y no tengo aprobadas ni siquiera las asignaturas de Plastilina y Recreo I, para poder optar a un título académico. Es más, no me regales la toga y el birrete. Obséquiame el título de Doctor equivalente al PHD, porque no quiero ponerme a investigar para hacer una tesis de grado y después tener que defenderla ante un jurado. Te repito, me traes mi cuero 'e chivo con el título de doctor.

No te preocupes si alguien califica de chimbo mi título universitario. En todo caso también tendrán que anular los de Nixon Moreno y Blanca Ibáñez, porque lo que es igual no es trampa.

Firma: El niño Doctorcito Chimbín Moreno.
Oiga y participe del programa "El Socialismo de las Cosas más Sencillas", con Martín Guédez

Esperando a Santa Claus

Esperando a Santa Claus


Roberto Bissio
Red del Tercer Mundo



En su recorrido anual por los cielos el sol se acerca en estos días al Trópico de Capricornio, a donde llegará inexorablemente el 22 de diciembre a las 4:08 de la mañana hora uruguaya, dando comienzo oficial al verano en el Hemisferio Sur y a la noche más larga del año en el Norte. En todo el planeta es época de festividades religiosas, de inicio de un nuevo ciclo y de búsqueda de signos y señales que nos permitan vaticinar el futuro.

Así, el 16 de diciembre, en la Meca cerca de dos millones de musulmanes se congregaron para dar inicio al Haj, la temporada de peregrinación que cada fiel
del Islam debe hacer al menos una vez en la vida. Los principales signos que los augures están interpretando son la invitación cursada al presidente iraní, Mahmud
Ahmadineyad, por el heredero de la casa de Saud, Abdala bin Abdelaziz (cuyo título oficial no es “rey” según traduce la prensa occidental, sino “guardián de los lugares santos”) y el perdón concedido por este último a una adolescente, que tras haber sido violada fue condenada a sufrir cincuenta latigazos por transgredir la prohibición de estar a solas con hombres no pertenecientes a su familia. ¿Habrá
reconciliación entre chiítas y sunitas? ¿Se abre camino a un reconocimiento de los derechos de las mujeres?

Pocos días antes del 10 de diciembre, el presidente George W. Bush encendió la primera vela de la semana de Hanukkah en la Casa Blanca, acorde con su política
de celebrar por separado los días sagrados de judíos, cristianos y musulmanes (en este caso en ocasión del Ramadán), en vez de saludar genéricamente a todos sus
ciudadanos por la “temporada de fiestas” como hacían sus antecesores. En momentos en que ochenta y siete países, incluyendo a los Estados Unidos y la Unión Europea, prometieron donar más de 7.000 millones de dólares a la administración palestina durante los próximos tres años, para viabilizar un futuro Estado y fortalecer la administración del presidente Mahmud Abbas, los vaticinadores tomaron nota de las
referencias de Bush a los “macabeos que liberaron la ciudad capital de Jerusalén”. ¿Fue un gesto electoral o un mensaje para tranquilizar a los “halcones” de Israel?

En el calendario chino el año de la rata de tierra recién comenzará el 7 de febrero, un buen augurio para mi tía Beba que ese día cumplirá noventa años, pero ya el 31 de diciembre será de gran fiesta en Beijing, porque comienza el Año Olímpico que legitimará a China como potencia y porque el 8 es el número de la suerte, de modo que también este cuarto de la humanidad está en periodo de fiestas y vaticinios.

Por supuesto que los pronosticadores profesionales que no quieren ser tratados de adivinos, videntes o nigromantes no prestan atención a supersticiones. A quien los economistas están mirando con atención en esta temporada, para deducir de su comportamiento cómo será el futuro próximo, es a... Santa Claus.

Si bien el día de San Nicolás es el 6 de diciembre y es éste el momento en que los niños reciben regalos en Holanda y partes de Europa oriental, mientras que en
el mundo hispánico hay que esperar todo un mes hasta que lleguen los Reyes Magos, en Estados Unidos, donde el consumo representa el setenta y dos por ciento del total de gastos de la economía, el frenesí del consumismo coincide con la llegada de Santa Claus, cuyo nombre deriva del de Nicolás y cuya mitra y vestimenta de obispo viró al rojo por una exitosa campaña de “marketing viral” de la Coca Cola a fines del siglo XIX.

El comportamiento de los consumidores norteamericanos en esta semana es el indicador que todos los economistas quieren ver, con la misma fruición con la que los sacerdotes romanos examinaban las vísceras de las aves migratorias en el extispicium. La pregunta es si estamos o no en el comienzo de una recesión y si de
producirse este estancamiento en la que todavía es la primera economía del mundo, los años de las vacas gordas habrán terminado también para el resto del planeta.

“Los indicadores de ingresos personales desde octubre parecen indicar que la economía está declinando, pero los datos de ventas, empleo y producción industrial
siguieron creciendo en noviembre”, dice Martin Feldman, presidente de la Oficina Nacional de Investigación Económica de Estados Unidos. A su juicio hay un “riesgo sustancial” de recesión en 2008, pero “no podemos estar seguros” hasta que se conozcan los datos de diciembre, a comienzos del año próximo. James Grant, editor del Grant Interest Rates Observer,dice que “nadie sabe” si habrá recesión o no y Jason Furman, analista de la Brookings Institution y ex sesor económico del presidente Bill Clinton explica que “es difícil discernir si una recesión es
inevitable porque estamos en medio de un nuevo tipo de crisis financiera, para la cual no existen mapas”.

Cuando los bancos pierden plata no pueden prestarla. Si no hay créditos, bajan la inversión y el consumo, la economía se enfría, comienza un ciclo de recesión
que, como el invierno, dará paso más tarde a una primavera de crecimiento. Así han sido siempre los ciclos económicos, al igual que las estaciones. La abundancia de liquidez de los últimos años llevó a los bancos norteamericanos a conceder préstamos
hipotecarios tan baratos que alimentaron una “burbuja” del sector inmobiliario. Ahora que el crédito se encarece, no hay quien compre las casas o las familias
restringen su consumo para pagar hipotecas mucho más caras que las originalmente contratadas.

La novedad es que, gracias a (o por culpa de, según como se lo mire) de liberalización y desregulación de los mercados financieros y la “comoditización” de las hipotecas (es decir su reventa en forma de títulos secundarios y así sucesivamente), nadie sabe exactamente en qué manos están las “carteras pesadas”
de hipotecas incobrables ni a cuánto ascenderán las pérdidas de los bancos. El Citibank fue salvado a última hora por la inyección de miles de millones de
petrodólares de un emir del Golfo. El UBS suizo, que ya anunció pérdidas por 10.000 millones de dólares y fue rescatado por el fondo estatal de inversión de Singapur, podría ver rebajados sus activos en otros 5.000 millones en los primeros meses de 2008.

En un gesto con escasos precedentes, los bancos centrales de Estados Unidos, la Unión Europea, Inglaterra y Suiza anunciaron hace pocos días la inyección de miles de millones de dólares en liquidez a los bancos en problemas. Sin embargo, las bolsas bajaron. “El problema de los mercados no es sólo falta de liquidez —sostiene el influyente columnista Paul Krugman en el New York Times- sino un problema fundamental de solvencia”. Si el problema es de liquidez, con “corridas” bancarias causadas por rumores, la inyección de dinero les permitiría salir de la emergencia. Si el problema es de solvencia, los bancos centrales sólo estarían socializando las
pérdidas.

Si la recesión se declara en Estados Unidos, ¿se extenderá a Europa? ¿Podrá el dinamismo de China e India salvar a las economías del Tercer Mundo? Stephen Roach, presidente para Asia del grupo inversor Morgan Stanley, anota que en Estados Unidos los consumidores gastaron cerca de 9,5 billones (millones de millones) de dólares el año pasado, contra un billón de los consumidores chinos y 650.000 millones de los ndios. A su juicio “es matemáticamente casi imposible” que Asia compense el impacto de una recesión norteamericana.

Si ese “casi” se convierte en certeza o no depende... de Santa Claus.

¡Felices Fiestas!


Roberto Bissio es director ejecutivo del Instituto del Tercer Mundo

La naturaleza no es muda

La naturaleza no es muda
Por Eduardo Galeano


El mundo pinta naturalezas muertas, sucumben los bosques naturales, se derriten los polos, el aire se hace irrespirable y el agua intomable, se plastifican las flores y la comida, y el cielo y la tierra se vuelven locos de remate.
Y mientras todo esto ocurre, un país latinoamericano, Ecuador, está discutiendo una nueva Constitución. Y en esa Constitución se abre la posibilidad de reconocer, por primera vez en la historia universal, los derechos de la naturaleza.
La naturaleza tiene mucho que decir, y ya va siendo hora de que nosotros, sus hijos, no sigamos haciéndonos los sordos. Y quizás hasta Dios escuche la llamada que suena desde este país andino, y agregue el undécimo mandamiento que se le había olvidado en las instrucciones que nos dio desde el monte Sinaí: "Amarás a la naturaleza, de la que formas parte".

- Un objeto que quiere ser sujeto

Durante miles de años, casi toda la gente tuvo el derecho de no tener derechos.
En los hechos, no son pocos los que siguen sin derechos, pero al menos se reconoce, ahora, el derecho de tenerlos; y eso es bastante más que un gesto de caridad de los amos del mundo para consuelo de sus siervos.

¿Y la naturaleza? En cierto modo, se podría decir, los derechos humanos abarcan a la naturaleza, porque ella no es una tarjeta postal para ser mirada desde afuera; pero bien sabe la naturaleza que hasta las mejores leyes humanas la tratan como objeto de propiedad, y nunca como sujeto de derecho.

Reducida a mera fuente de recursos naturales y buenos negocios, ella puede ser legalmente malherida, y hasta exterminada, sin que se escuchen sus quejas y sin que las normas jurídicas impidan la impunidad de sus criminales. A lo sumo, en el mejor de los casos, son las víctimas humanas quienes pueden exigir una indemnización más o menos simbólica, y eso siempre
después de que el daño se ha hecho, pero las leyes no evitan ni detienen los atentados contra la tierra, el agua o el aire. Suena raro, ¿no? Esto de que la naturaleza tenga derechos... Una locura.
¡Como si la naturaleza fuera persona! En cambio, suena de lo más normal que las grandes empresas de los Estados Unidos disfruten de derechos humanos. En 1886, la Suprema Corte de los Estados Unidos, modelo de la justicia universal, extendió los derechos humanos a las corporaciones privadas. La ley les reconoció los mismos derechos que a las personas, derecho a la vida, a la libre expresión, a la privacidad y a todo lo demás, como si las empresas respiraran. Más de ciento veinte años han pasado y así sigue siendo. A nadie le llama la atención.

- Gritos y susurros

Nada tiene de raro, ni de anormal, el proyecto que quiere incorporar los derechos de la naturaleza a la nueva Constitución de Ecuador.
Este país ha sufrido numerosas devastaciones a lo largo de su historia. Por citar un solo ejemplo, durante más de un cuarto de siglo, hasta 1992, la empresa petrolera Texaco vomitó impunemente dieciocho mil millones de galones de veneno sobre tierras, ríos y gentes. Una vez cumplida esta obra de beneficencia en la Amazonia ecuatoriana, la empresa nacida en Texas
celebró matrimonio con la Standard Oil. Para entonces, la Standard Oil de Rockefeller había pasado a llamarse Chevron y estaba dirigida por Condoleezza Rice. Después un oleoducto trasladó a Condoleezza hasta la Casa Blanca, mientras la familia Chevron-Texaco continuaba contaminando el mundo.

Pero las heridas abiertas en el cuerpo de Ecuador por la Texaco y otras empresas no son la única fuente de inspiración de esta gran novedad jurídica que se intenta llevar adelante. Además, y no es lo de menos, la reivindicación de la naturaleza forma parte de un proceso de recuperación de
las más antiguas tradiciones de Ecuador y de América toda. Se propone que el Estado reconozca y garantice el derecho a mantener y regenerar los ciclos vitales naturales, y no es por casualidad que la asamblea constituyente ha empezado por identificar sus objetivos de renacimiento nacional con el ideal de vida del "sumak kausai". Eso significa, en lengua quichua, vida armoniosa: armonía entre nosotros y armonía con la naturaleza, que nos engendra, nos alimenta y nos abriga y que tiene vida propia, y valores propios, más allá de nosotros.

Esas tradiciones siguen milagrosamente vivas, a pesar de la pesada herencia del racismo que en Ecuador, como en toda América, continúa mutilando la realidad y la memoria. Y no son sólo el patrimonio de su numerosa población indígena, que supo perpetuarlas a lo largo de cinco siglos de prohibición y desprecio. Pertenecen a todo el país, y al mundo entero, estas voces del
pasado que ayudan a adivinar otro futuro posible.

Desde que la espada y la cruz desembarcaron en tierras americanas, la conquista europea castigó la adoración de la naturaleza, que era pecado de idolatría, con penas de azote, horca o fuego. La comunión entre la naturaleza y la gente, costumbre pagana, fue abolida en nombre de Dios y después en nombre de la Civilización. En toda América, y en el mundo, seguimos pagando las consecuencias de ese divorcio obligatorio.

DIALOGO EN MADRID CON JUAN GELMAN

DIALOGO EN MADRID CON JUAN GELMAN
Del amor y la guerra


Juan Gelman recibió el premio Cervantes en una España que se apresta a conmemorar el bicentenario de la guerra de la independencia, que es uno de los capítulos menos conocidos de la historia argentina. Así lo exponen dos muestras descomunales de sus genios, Goya y Picasso, cuya afinidad con la obra de Gelman es sobrecogedora. Ese es el contexto del diálogo sobre la
poesía y el periodismo, sobre el amor y la guerra, que se transcribe aquí.

Por Horacio Verbitsky
Desde Madrid

El azar hizo que la entrega del premio Cervantes a Juan Gelman coincidiera con dos muestras descomunales de los genios del arte español de los últimos dos siglos, Goya y Picasso. La afinidad de su visión del mundo con la del poeta argentino es sobrecogedora: ahí están las heridas incurables de la guerra, que marcaron para siempre a los tres, pero también las minucias de
la vida cotidiana y, en Picasso y Gelman, las delicias y la exuberancia gozosa del amor, que a Goya le fueron negadas. El diálogo comienza con un poema en el que Juan decía que por escribirlo no tomaría el poder, no haría la revolución, no le darían ropa ni tabaco ni vino.

-¿Y qué pasó?

-No hice la Revolución.

-Pero has invitado a comer a muchos amigos con el premio que te otorgó el rey de España.

-El rey no. El gobierno español. El premio de literatura en lengua castellana Miguel de Cervantes lo otorga el gobierno español, auspiciado por la monarquía.

-¿Sos consciente de cuántas cosas contribuiste a cambiar con tu escritura, en la Argentina y en otros lugares?

-Contámelo vos.

-Por un lado me impresiona tu influencia en los poetas jóvenes, tal vez inconsciente pero que se percibe hasta en cómo entonan cuando leen.

-Hay algunos a los que les gusta imitarme, tal vez en broma.

-Pero otros, sobre todo muy jóvenes, no lo hacen ni en broma ni a propósito.

-No sé si es bueno para ellos. Es como decía Basho, el poeta japonés del 1600: no hay que imitar a los antiguos, hay que buscar lo mismo que ellos buscaban. Y todos buscamos la poesía.

-Pero además, tu trabajo como periodista, la investigación que hiciste en busca de tu nieta, limpió la cúpula militar argentina, cuando identificaste a uno de los cinco generales más poderosos en actividad como partícipe mediato; desenmascaró a varios presidentes uruguayos complacientes con la dictadura y permitió alguna medida de renovación política en ese país.

-La investigación propiamente dicha la dirigió Mara, con mi ayuda (Mara es el desmesurado torbellino de mujer con que Gelman vive desde hace dos décadas, hija del poeta Juan Carlos La Madrid). Todas las noches después del trabajo analizábamos el peso de los indicios, de todo lo que pudiese ser falso. Contamos con la ayuda de sobrevivientes uruguayos. Mara leyó miles de
documentos, libros. Yo tenía una dificultad: también leía pero se me olvidaba. Creo que es una limitación del familiar próximo. Mara lo hizo como ciudadana, además del cariño que me tiene. Lo que resultó muy importante para encontrar a mi nieta fue la campaña periodística, con ayuda de mucha gente. Se reunieron más de cien mil firmas de más de cuarenta países, de escritores, artistas, pintores, gente de a pie. A eso contribuyeron cartas como las de Saramago, Chico Buarque y muchos otros. La carta de Günther Grass provocó una respuesta de(l ex presidente uruguago Julio) Sanguinetti que le costó el doctorado honoris causa que estaba buscando de una
universidad alemana. Esto permitió que se cumpliera lo que siempre esperamos: que un vecino, una vecina, que presenció la llegada de un bebé a una casa donde no había hijos, lo asociara con lo que se publicaba. Esto provocó un gran sacudón en el Uruguay.

-Esta campaña militante reprodujo la que organizaste para denunciar a la dictadura argentina.

-Es cierto. La primera declaración contra la dictadura la firmaron Willy Brandt, François Mitterrand, varios jefes laboristas de Gran Bretaña, los primer ministros de Portugal, Mário Soares; de Suecia, Olof Palme; de Dinamarca, Anker Jorgensen...

-También firmaron muchos intelectuales y artistas, y ahí aparece otra faceta tuya, porque quien pedía esa adhesión además de ser un militante era un poeta conocido y querido.

-Creo que sí. Con el primer ministro austríaco Bruno Kreisky ocurrió una historia muy curiosa. El encargado de relaciones exteriores de los socialdemócratas me citó en la sede del partido, del que Kreisky era secretario general. Kreisky leyó la declaración y me dijo que no podía firmarla, porque dada su investidura infringiría principios internacionales. Le dije que no le pedía la firma como primer ministro sino como líder del partido. El se rió y dijo, "pero señor Gelman, por favor". Le dije, está bien señor primer ministro, sólo le quiero recordar lo que pasó con León
Blum y la guerra civil española. Me levanté, me llevé el impermeable que había colgado en una percha y con una bronca bárbara llamé al ascensor. Detrás mío salió corriendo el responsable de relaciones exteriores del partido y me dijo: Kreisky va a firmar.

-Blum era el primer ministro del Frente Popular en Francia cuando comenzó la guerra en España.

-Declaró la neutralidad. La República, que hubiera podido recibir mucha ayuda de Francia y vía Francia, quedó aislada en la Península. Esa era una memoria que Kreisky seguramente tenía, porque era un hombre ya de edad. Pude sumar a la campaña por mi nieta a todos los contactos que hice en razón de la denuncia contra la dictadura. Y ocurrió lo que deseábamos. Una vecina
consiguió mi teléfono, me llamó y me dijo: al lado mío, pasó esto. Cotejamos las fechas y los demás elementos y coincidían. La única pieza que faltaba era el ADN. Fuimos al Uruguay en forma discreta y cubrimos el encuentro con mi nieta con un homenaje que me hacían.

-¿Cómo llegaste a encontrarte con Macarena?

-A través de un intermediario, que fue el obispo Pablo Galimberti. Era obispo de San José, donde el hombre que funcionó como padre de Maca fue jefe de policía. Este hombre murió cuatro días después de la publicación de mi primera carta abierta a Sanguinetti, con quien tenía amistad personal. Quien lo confesó fue el obispo Galimberti. Le mandé una carta de seis páginas
resumiendo la investigación y pidiéndole que intermediara con la señora que crió a Macarena. Así lo hizo, sin preguntarme nada, como si conociera la historia.

-Como confesor del comisario.

-Todo esto lo imagino. No es que me conste. Quince días después, como un gesto de amor, la señora le contó todo a mi nieta. Ella la sigue llamando mamá, cosa que entendemos perfectamente. Macarena quiso ver a Galimberti y a través de él tener un puente con nosotros. Fue muy valiente mi nieta. Cuando fuimos a Montevideo para verla, (el presidente Jorge) Batlle quiso convertir eso en un hecho político y armó la barahúnda que armó.

-Y se ligó las cartas que se ligó. Voy a cometer una infidencia, si te molesta la omito: fue muy hermoso verte junto con Mara, la hija de ella y los cuatro nietos de ambos, mezclados como en una familia amorosa. Después de todo lo que sufrieron es conmovedor verlos tan aptos para gozar de la vida. Con tanto humor y amor y alegría.

-Ponelo. Esa no es una infidencia, apenas si es cierto.

-Escribís periodismo y poesía en forma distinta. Sos minucioso y obsesivo en tus artículos, o cuando editabas el diario Noticias o los suplementos culturales de La Opinión y de Página/12. En cambio la poesía llega cuando menos lo esperás y es un torrente. Cuando viene tenés que ponerte a escribir, de un tirón, porque si no te poemás encima.

-Efectivamente, te poemás encima. Eso sí que está bueno. Ja, ja.

-¿Escribís poesía a mano o a máquina?

-A máquina. A eso me acostumbró el periodismo. Me costó mucho pasar del lápiz a la tinta. Trabajaba en una casa de venta de repuestos de automóviles donde hacía facturas a máquina. Un día me asaltó la Señora, así que fingiendo que hacía una factura escribí un poema. Ahí se me fue el miedo a la máquina de escribir. En la revista Panorama, cuando trabajaba con Paco Urondo, con el Moro Edgardo Da Mommio, con Pablo Piacentini me pasaba lo mismo. De repente, en medio del trabajo de la redacción tenía que fingir que estaba escribiendo un artículo. En esa redacción escribí la mayoría de los poemas de Sidney West. Con ese libro me pasó una cosa muy graciosa. En la revista Confirmado trabajaba Luis Alberto Murray, que siempre sabía todo sobre todo. Cuando aparecieron Traducciones. Los poemas de Sidney West, me dijo que la traducción era impecable.

-Aclaración imprescindible para lectores que no saben todo de todo: Sidney West es el nombre imaginario que eligió Gelman para firmar esos poemas.

-Y ahora se cierra el círculo: se va a publicar en Gran Bretaña, traducido al inglés. Para los actos paralelos al premio Cervantes, Menchi Sábat hizo un dibujo de Sidney West joven, atribuido a Frank Howard Lindsay, con una leyenda extraordinaria: "Esta imagen de Sidney West ha generado discusiones entre estudiosos, que la consideran falsa, y críticos de arte, cuyos juicios
oscilan entre la mediocridad y el rechazo. Conservado en una vitrina del Museo de Peterbourough (New Hampsire), el dibujo fue reconocido por un nieto de Frank Howard Lindsay, que perdió sus manos en un accidente hípico".

-¿Escribiste algún libro en los meses de Noticias?

-Poemas sí, un libro creo que no. Sólo algunas de esas cosas se publicaron. En ese momento la cabeza y el corazón estaban puestos en otra cosa. Trabajábamos con una pistola en el cajón del escritorio. Los fondos del diario se tocaban con el museo del traje, donde habían nombrado directora a la mujer de Lorenzo Miguel. Enfrente teníamos un local de la Juventud Sindical. Estábamos lujosamente rodeados. Cuando pusieron la bomba en el diario los inspectores policiales miraron los escombros y dijeron que había sido una obra de arte.

-Hacían un doble juego. Si nos limitábamos a nuestro trabajo periodístico y no tomábamos ninguna previsión, venía la Triple A y nos volaba el edificio o nos tiroteaban los autos que iban con el material a la imprenta. Si tomábamos recaudos defensivos, caía la policía y nos procesaban por portación de armas. Nuestros problemas periodísticos eran distintos a los de hoy.

-Ese diario fue una hazaña. Había que cerrar un matutino a las ocho de la noche. Componíamos en una imprenta e imprimíamos en otras dos, porque el tiraje crecía y no bastaba con una sola porque se perdían los recorridos. Se convirtió en un diario popular.

-Ese fue un mérito tuyo.

-Mío no, por favor. De muchos.

-Pero el jefe de redacción eras vos.

-Vos sabés que lo dirigía un grupo: Paco (Urondo), Rodolfo (Walsh), vos y yo. No era unipersonal la organización del diario.

-Pero vos aportaste mucho a ese toque popular. Me acuerdo cuando pusiste como segundo título que habíamos acertado seis de las ocho carreras de Palermo.

-Eramos todos.

-Cuando nos citamos en París luego de la dictadura...

-... en aquella estación de subte...

-... a la que llegaste con un impermeable de novela negra, me impresionó verte tan joven y vital después de todo lo que pasaste. Pero me preguntaba entonces y te lo pregunto ahora cómo sería el regreso a ese país donde desaparecieron a Marcelo y a todas nuestras ilusiones y proyectos. Volviste a la Argentina en 1988.

-Me pasaron cosas muy buenas, como el reencuentro con amigos-hermanos. Y otras no tan buenas. Entré a comer un sandwich en un bar al paso de la calle Lavalle, de esos con taburetes en la barra. Delante mío había un tipo con todo el aspecto de un cana o un milico, el corte de pelo, la cara, la forma de vestir. Me asaltó un pensamiento que no podía evitar. ¿No habrá tenido
que ver con la muerte de Marcelo? Por supuesto no tenía ningún elemento para afirmarlo pero la pregunta estaba ahí. No hice peregrinaciones para recordar nada pero pasaba por lugares y decía, aquí me vi con Rodolfo la última vez, aquí estaba con Marcelo y (mi hija) Nora, y comimos en un restaurante y Marcelo escribió un poema en el mantel de estraza.

-¿El de la oveja negra?

-Sí.

-¿Es el único poema que tenés de Marcelo?

-No. En un libro que acaba de editar la otra sociedad de escritores, no la SADE, hay más de cien poetas desaparecidos, entre ellos Marcelo. Algunos fueron traducidos al francés.

-¿Cómo los tenés?

-Cuando volví a la Argentina mi ex me dio una copia. Hay poemas acojonantes, parecen auto profecías. Auto profecías cumplidas.

-¿Te referís al que escribió en el mantel del restaurante?

-Sí. Decía

"la oveja negra
pace en el campo negro
sobre la nieve negra
bajo la noche negra
junto a la ciudad negra
donde lloro vestido de rojo".

-¿De qué época son?

-Cuando me separé de la madre de Marcelo y Nora, yo vivía solo en un departamento en la calle Jean Jaurès. Ellos venían los fines de semana. En ese momento él ya escribía.

-¿Qué edad tenía?

-Quince o dieciséis. Hacíamos ediciones caseras de lo que escribía a máquina. Lo encuadernábamos. Además yo les grababa los sueños. Me contaban qué habían soñado y yo los grababa, como decían los surrealistas, que los hijos les cuenten los sueños a los padres.

-¿Conservás esos sueños grabados?

-Desgraciadamente no. Pero me los acuerdo muy bien. Marcelo siempre tuvo una gran inclinación por la lectura. A sus doce años y once de la nena nos fuimos a pasar vacaciones en Córdoba. Tengo las fotos, con ellos a caballo. Fue muy poco después de la muerte del Che. Marcelo decía que el Che se equivocó y que no consiguió el apoyo de los campesinos bolivianos. Yo se lo discutía. Pero con el tiempo se vio que no era tan errónea su teoría. Su interés político fue muy temprano.

-Cuando decidiste trasterrarte a México los amigos lo sentimos mucho, pero me pareció muy lógico. Se que te fuiste para seguir a Mara, que fue una decisión por amor...

-... en el ínterin me morí cuatro veces (el número de paros cardíacos que el poeta sufrió en 1989)... Con los años creo que hice muy bien. Había gente muy enojada conmigo porque me fui, y algunos siguen enojados. Otros en cambio me ayudaron mucho, apoyando esa decisión. Vos sabés quiénes son.
-Mi impresión es que no pudiste soportar el encuentro con un país que había cambiado tanto. Hoy podés decir "País que fue será" (el título de uno de sus últimos libros). Pero hace veinte años veías un país que fue y ya no era y tal vez con el temor de que nunca volviera a ser. Habías idealizado tu regreso. Ése sería el momento de la verdad y de la justicia, ibas a descubrir quiénes mataron a Marcelo. Y te encontraste con una realidad muy gris. Sin embargo, a lo largo de muchos años lograste desde México una incidencia en la vida argentina tanto o más grande de lo que idealizabas cuando estabas en París. Sólo alguien capaz de generar una realidad a partir
de sí mismo puede conseguirlo, alguien muy grande.

-Mirá si soy grande que me falta poquito para cumplir 78.

-¿Cómo has vivido a la distancia los distintos momentos recientes del país?

-Algunos testimonios han quedado en las columnas que escribo. Lo de Menem fue terrible, la venta del país, además de la impunidad de los indultos; el desastre de De la Rúa; la recuperación que comenzó con Néstor Kirchner. Lo viví de lejos pero de cerca. Todos los días sigo la prensa argentina y me interesa profundamente todo lo que ocurre. La distancia me permitió
reflexionar sobre el pasado anterior al exilio. Siempre he creído que lo peor del exilio, aparte de las desgracias personales, fue la derrota. Porque aparte de los 30 mil también desapareció un proyecto, que no ha vuelto a aparecer. Y tal vez tarde décadas en aparecer algo que se le parezca.

-Ese fue uno de los temas de nuestra correspondencia.

-Vos me decías que nuestro mejor destino era ser Neanderthales.

-Fósiles para que haya combustible en algún lejano futuro.

-Lo de los fósiles está muy bien, porque nunca cambian.

-Veinte años no es nada, y cuarenta...

-... es el doble de nada...

-... cuando hay gente que sigue siendo la que era.

-Como fósil no podes envejecer más. Ya te quedás en ese estado.

-Pero al mismo tiempo siento que cambiás mucho, que sos un fósil muy plástico. En tu poesía y también en tu prosa, en tu visión política se ve una evolución permanente. Fuiste muy dogmático y ya no lo sos. ¿Cómo ves el panorama latinoamericano actual?

-Hay cambios de signo progresista en distintos países. Pero me pregunto en qué va a terminar todo eso, porque hay cosas muy contradictorias, como en Uruguay o en Chile, con el ALCA. Hay cuestiones que no están claras. El Frente manifestó públicamente un programa que no se cumple. Una cosa que nos pasó a nosotros es que subestimamos al enemigo.

La casa que era Neruda por dentro

La casa que era Neruda por dentro


Caminar por las habitaciones maravillosamente ilógicas de Isla Negra es seguir el rastro de un poeta que lo coleccionaba todo: libros, minerales o mascarones de barcos
Benjamín Prado 26/04/2008

Como todos los lectores reincidentes, he pasado una parte sustancial de mi vida caminando por ciudades inventadas, y en mi pasaporte están los sellos de la frondosa Macondo, de Gabriel Gabriel García Márquez; la lúgubre Comala que construyó Juan Rulfo dentro de su Pedro Páramo; la Santa María de El astillero, Juntacadáveres y otras obras de Juan Carlos Onetti; o las alegóricas Tlön y Uqbar de Jorge Luis Borges. Más al norte, en Estados Unidos, estuve con William Faulkner en un lugar que mucha gente parece haber visitado de oídas: el condado de Yoknapatawpha, que se extiende desde la novela Sartoris hasta Los rateros e incluye en su territorio libros como El ruido y la furia, Mientras agonizo, Santuario, Luz de agosto, Absalom, Absalom o La ciudad. Y en Europa, pasé un verano con Ernst Jünger en Heliópolis, donde asistí a la feroz lucha política entre los partidarios de Landvogt, defensor de los valores colectivos, y los del Procónsul, abogados del derecho individual; dediqué unas semanas del invierno de 1999 a viajar por las Ciudades invisibles de Italo Calvino, donde vi calles pavimentadas con estaño, torres de aluminio y casas suspendidas sobre un precipicio a base de cuerdas. Y, si la imaginación no me engaña, también recuerdo haber visto con mis propios ojos la fortaleza Bastiani, de Dino Buzzati, y la Tierra Media de Tolkien, si es que esos lugares que se encuentran en El desierto de los tártaros y El señor de los anillos están, de verdad, en nuestro continente.
Coleccionar es ir convirtiendo los caprichos en objetos, pero es también construir una estela
Antes de irme de allí como si saliera de un sueño, dejé a los pies del caballo con tres colas un ejemplar de 'Fustigada luz'

En España no he dejado de pasear por la Orbajosa de Benito Pérez Galdós y la Vetusta de Clarín; ni por el bosque de Mantua, situado en la hipotética Región que Juan Benet imaginó para sus Herrumbrosas lanzas; ni junto al río Dul, en la pantanosa Escescésina de El testimonio de Yarfoz, de Rafael Sänchez Ferlosio; ni por los campos de Agramante de algunas novelas de José Manuel Caballero Bonald, entre la desembocadura del río Guadalquivir y el coto de Doñana. Todos me gustaron hasta el punto de que tengo enmarcados en las paredes de mi casa los mapas de algunos de esos lugares que pintaron sus autores. Pero ninguno me fascinó tanto ni me pareció tan inverosímil como una playa real que su habitante más ilustre transformó en otro sitio ilusorio: Isla Negra, en la costa de Chile, donde levantó su casa más recordada el poeta Pablo Neruda.

Entrar en la casa de un escritor que admiras es siempre una experiencia emocionante que te hace sentir, contra toda lógica, el latido de la vida entre las cuatro paredes del muerto, como si el propietario de los muebles, la ropa que cuelga en los armarios, los libros de las estanterías o la máquina de escribir sobre la mesa acabara de marcharse o estuviera a punto de volver. Marina Tsvietáieva lo explicó de forma magnífica en su libro Natalia Goncharova, retrato de una pintora: "Hay casas en las que se vive. Hay casas que viven. Por sí mismas. Al margen de las personas. Casas donde hay de todo (todo, salvo las personas). Casas que han vivido tanto (...) que simplemente continúan viviendo. Como un libro que ya no necesita de su autor, ni de sus lectores". Es fácil sentir eso en Finca Vigía, la mansión colonial de Ernst Hemingway en San Francisco de Paula, muy cerca de La Habana; o en Rungstedlund, el hogar de Isak Dinesen, situado a media hora de Copenhague, donde la autora de Memorias de África vivió y está enterrada; o en la Huerta de San Vicente, la residencia veraniega de la familia García Lorca en Granada, donde también podrían llevarse los restos del autor del Romancero Gitano si sus herederos quisieran sacarlo de su fosa común en Víznar.

Neruda también está enterrado en su casa de Isla Negra, frente al océano Pacífico, pero también lo estuvo en otro lugar: una humilde tumba de un cementerio de Santiago, donde debieron dejarlo, casi clandestinamente, cuando murió a los pocos días del golpe de Estado contra Salvador Allende. Como se ve, su historia y la de su amigo Federico García Lorca estuvieron llenas de paralelismos hasta el fin. Al autor de Veinte poemas de amor y una canción desesperada no lo asesinaron del todo los militares sediciosos, como creyó al recibir la noticia otro de sus mejores amigos, Rafael Alberti, quien incluso hizo algunas declaraciones y escribió un poema urgente en el que lloraba su asesinato. En realidad, el premio Nobel chileno murió de cáncer, pero todos los que estuvieron a su lado en esos días terminales, entre ellos los doctores que lo cuidaban, coinciden en afirmar que la impresión que le produjo el levantamiento militar, la tristeza por la muerte de Salvador Allende y las noticias del saqueo de sus casas de Valparaíso y Santiago lo mataron antes de tiempo. Los soldados también fueron entonces a Isla Negra, en busca de armas, que desde luego no encontraron, pero Neruda no pudo ser trasladado allí hasta el año 1990, cuando la democracia consiguió sacar el país de debajo de las botas de los criminales.
Isla Negra no es una isla, sino sólo un fragmento de costa, y la casa de Neruda tampoco es una casa, sino un museo. Lo es ahora, pero también lo fue en vida del poeta, que como se sabe era un coleccionista incansable, hasta el punto de que el edificio original se tuvo que ir ampliando sucesivamente para poder albergar sus mascarones de proa, botellas con barcos dentro, caracolas, ídolos de barro, máscaras, mariposas, pipas, minerales, escarabajos, mapamundis, llaves y, por supuesto, primeras ediciones que serían la envidia de cualquier bibliófilo. A pesar de todo, el autor de Residencia en la tierra y el Canto general afirmaba que más que un coleccionista él era un "cosista", alguien a quien le gustaba juntar cosas. Lo hacía hasta el punto de construir una estancia exclusiva para un caballo de cartón de tamaño natural que le compró a un talabartero y para el que llegó a dar una fiesta de bienvenida a la que acudieron tres amigos con el mismo regalo: la cola que le faltaba al animal. Neruda solucionó la coincidencia colocándole las tres y bautizándolo, en ese mismo momento y por razones obvias, como "El caballo más feliz del mundo".

Coleccionar es ir convirtiendo los caprichos en objetos, pero es también construir una estela, y por eso caminar por las habitaciones maravillosamente ilógicas de Isla Negra es seguir el rastro de Neruda, pero también el de su poesía, que a fin de cuentas no es más que la otra dirección del mismo camino: si dentro de sus obras el escritor, disfrazado según el caso de cocinero, ornitólogo, naturalista o gemólogo, convirtió en poesía todo lo que veía, tocaba o degustaba, como demuestran los tres volúmenes de las Odas elementales, su Arte de pájaros o Las piedras de Chile, fuera de ellas el hombre fue tirando de sus deseos hacia la realidad y los transformó en materia palpable que, sin embargo, no perdiese su condición mágica. Buen ejemplo es el de los mascarones, y entre ellos el de su preferido, el que tiene forma de mujer y se llama María Celeste, que lloraba todas las noches cuando el calor del fuego que ardía en la chimenea condensaba el vapor en sus ojos de vidrio.

La tumba del gran enemigo literario de Pablo Neruda, que fue Vicente Huidobro, está en la ciudad costera de Cartagena y en ella hay una famosa inscripción que acaba de esta forma: "Abrid la tumba / Al fondo de esta tumba se ve el mar". Me temo que Neruda también le ganó esa batalla al magnífico creacionista de Altazor, porque donde sin duda está el mar es en su casa de ese lugar a la vez real y ficticio que es Isla Negra, junto a las mil y una cosas de este mundo que quisieron abarcar tanto sus versos como sus manos.

Antes de irme de allí como si saliera de un sueño en el que me hubiese visto andar por el interior del propio Neruda, dejé a los pies del caballo con tres colas un ejemplar de Fustigada luz, el libro en el que Rafael Alberti incluyó los dos poemas que le salieron del corazón cuando supo que habían muerto a su amigo, o que lo habían morido, como diría Juan Gelman, pocos días después del primer 11 de septiembre terrible de la Historia, el que sufrió Chile en 1973. Quizás ahora esté en la biblioteca del autor del Canto general, junto a sus primeras ediciones de Quevedo, de Alonso de Ercilla, de Victor Hugo con la firma del creador de Nuestra señora de París, o de aquel tomo artesanal de Paloma por dentro que constaba de poemas suyos y dibujos de García Lorca.
A Neruda le hubiera gustado tenerlo.

El poder de la tilde

El poder de la tilde

Por Mallela V. Pérez Palomino


Espeluznante ver algunos escritos en los medios, que presentan errores ortográficos, aún en esta época en que los programas de computadora nos corrigen, incluso lo referente a la redacción.

Evoco a la maestra Evelia, cuando nos repetía y hacía que repitiéramos las reglas de oro respecto al acento y su imagen representativa que es la tilde.

"Palabras agudas: acento en la última sílaba, palabras graves: acento en la penúltima sílaba, palabras esdrújulas: acento en la antepenúltima sílaba".

Mi amigo Alberto tuvo siempre dificultad en clasificar las palabras, y la maestra nos reiteraba: "el secreto es decirlas, mencionarlas fingiendo el acento en diferentes sílabas, y de esa forma, surge espontánea la verdad clasificatoria".

Esdrújulas: siempre se tildan; graves: se tildan las que no terminan en n , s o vocal ; agudas: todo lo contrario, se tildan las que terminan en n, s o vocal.

Ejemplos de esdrújulas: es DRÚ ju las, SÍ laba, orto GRÁ fico. (la mayúscula es sólo para distinguir).

Mi fraternal Federico y yo solíamos disertar, en los tiempos libres o en el recreo, las clases recibidas en el salón de clases. Llegamos juntos a la conclusión que las palabras graves componen una abrumadora mayoría, aunque hoy día creo que al respecto, los argentinos piensan de otra
forma.

Ejemplos de palabras graves: e JEM plos, pa LA bras, GRA ves.

La tilde en su función diacrítica (del griego diakritikos -que distingue), nos permite diferenciar una cosa de la otra.

Sin pretensiones de protagonismo, trato de dar un poco de ilustración. Y me refiero al protagonismo porque a alguna ganadora de premio literario se le ocurrió decir una vez que solamente murciélago contenía todas las vocales, dejando por fuera un montón de opciones sencillas como abuelito o menstruación, tal cual puntualizara aquel lector Blanco Sánchez de la
revista ABC.

Las reglas están escritas y si queremos inventar alguna nueva, bien podemos hacer una rigurosa investigación antes de plantearla, pues corremos el riesgo de hacer el ridículo.

Y volviendo a la tilde, vemos que se convierte en la figura principal de una interminable odisea a través de las letras castellanas que, entre muchos ejemplos, la lleva a devolver la reverencia a tabernáculo y la decencia a tentáculo. Eso sin contar que habitáculo se convierte, gracias a ella, en un espacio donde se puede vivir.

Igualmente da calidad real a séquito, que no lo carente de humedad o calidad etílica de sequito, diminutivo de seco.

Existían en el salón quienes amaban el idioma inglés por carecer de tildes y así lo expresaban sin pizca de vergüenza. Cuando revisaba yo otrora los cuadernos de mi hija y me encontraba con sus horrores ortográficos, ella me decía en tono de chanza que las tildes se vendían por separado como reza algún comercial de juguetes.

No sé por qué este tema tiene tan sin cuidado a la mayoría de los jóvenes. Tendría que echarle la culpa a la tecnología, ya que la juventud se comunica con emoticones, simbologías elaboradas con los signos de puntuación :-) y para ellos siempre es igual a 100pre.

No es extraño que con un lenguaje tan rico (es menester no decir lengua) como lo es el castellano, nos encanten los juegos y rejuegos de palabras y no evitemos el casorio con el doble sentido, que a la postre provocan mucha más hilaridad que la llana vulgaridad.

Ejemplo de palabras agudas: hilari dad , vulgari DAD .

Con la poderosa influencia de la tilde Ambrosia, una gentil dama, se trasmuta en exquisitez o alimento para dioses (ambrosía) y secretaría adquiere carácter institucional después de haber sido una persona; aunque ahora les ha dado por llamarles asistentes administrativas a las
sacrificadas y consagradas secretarias.

Además, gracias a la tilde, Tomás pasa a ser un caballero después de haber significado que bebes (o ases-de asir-) o también dosis de medicamento que se bebe (tomas). Por otro lado, s olo , adjetivo que significa no estar acompañado , se convierte en sólo , es decir, solamente.

La posición de la tilde es importante también, así, rió , pretérito del verbo reír para la tercera persona singular (él o ella), pasa a ser río, curso de agua o el presente de la primera persona singular (yo) del mismo verbo enunciado.

Veamos otros ejemplos: habito que no es más que la enunciación que resido o moro , se convierte en costumbre o vestimenta para religiosas ; y el verbo -tiempo presente- publica pasa a ser una cuestión del conocimiento de todo el mundo, como quien dice. ( pública) .

No ignoremos que el adjetivo pública al ser aplicado a un personaje femenino, suele hacer perder a la dama su decoro y decencia. ¡Cosas del idioma!

No se trata de sacrificar la comunicación en razón del vocabulario ampuloso y dominguero. Eso sería como aquella anécdota del científico que habiendo encontrado el último espécimen de una rara ave, la diseccionó para estudiarla. El estudio al final no sirvió para nada, porque la
especie fue exterminada.

Podemos utilizar lenguaje sencillo que, bien aplicado con la gramática y ortografía correctas, nos llevará a un intento de recuperación en medio de esta crisis idiomática. Aquellos que prefieren le escriban sus artículos, sugiero vean como una buena opción requerir los pasen por el
departamento de control de calidad antes de su correspondiente publicación.

Y es importante la revisión final del escrito, ya que a veces la computadora se declara autónoma y sustituye los términos o los acentos por los que, de manera independiente, considera correctos. ¡Cosas de la tecnología!

23 de abril: Día del Idioma Español (Decreto No. 101 de 19 de marzo de 1998
).

*El concepto de la vida,* por Carlos Rodríguez Almaguer

*El concepto de la vida,* por Carlos Rodríguez Almaguer

"Disciplina quiere decir orden,
y orden quiere decir triunfo."
José Martí



*"No basta nacer, es preciso hacerse",* escribía el joven José Martí a propósito de un talentoso poeta español, que pudo serlo todo y no fue nada, porque le faltó el complemento mágico que hace triunfar cualquier proyecto humano y trae el fracaso de todo lo que no lo contemple: voluntad y disciplina.

Sin voluntad y sin disciplina se puede existir pero jamás vivir. Existir es solo ver que las cosas pasan o hasta ignorar lo que pasa; vivir es no solo darse cuenta de que están pasando cosas sino ser parte de ellas, o mejor aún: hacer que sucedan. Vivir es emplear cada segundo de la vida que nos ha sido dada, participar activamente en ella, orientarla hacia un fin determinado: crear un proyecto de vida cuya concreción nos ocupe la existencia. Orientarnos hacia el bien, si queremos ser felices, o hacia el mal, si queremos ser desdichados. Por lo cual es evidente que hacer el mal
no es una opción.

Sin disciplina no podremos nunca elevar el animal biológico que somos cuando nacemos a la categoría de ser humano. La condición humana exige mucho más que instintos naturales y anatomía específica; exige instrucción y cultura para alcanzar la ética que es la condición sine qua non de nuestra especie. Alcanzar esa ética exige a su vez voluntad y disciplina consciente. La otra "disciplina", la del "palo y la zanahoria", no nos hace humanos; al contrario, enfatiza nuestra condición animal en primer grado, toda vez que solo somos "disciplinados" y frenamos nuestros instintos ante la amenaza o ante el interés.

Sabido es que instrucción no es cultura. Que la cultura no es solo instrucción, si bien ésta la eleva y hace resplandecer. Cultura es sobre todo la capacidad que tenemos para relacionarnos con los demás, para convivir en sociedad, para controlar nuestra conducta y frenar nuestros instintos. Se puede ser una persona muy instruida y a la vez tremendamente inculta. Paradójico pero común. Miremos a nuestro alrededor en cualquier parte, en las grandes ciudades es más evidente, y veremos cuantas indisciplinas sociales se cometen en solo una hora. Preguntemos al sujeto indisciplinado su nivel escolar (que no cultural, porque este puede ser todavía el de los hombres de las cavernas), será de seguro por encima del noveno grado, cuando no bachiller o universitario. ¿Qué ocurrió entonces?
Desde tiempos lejanos se viene debatiendo sobre el llamado "libre albedrío".
Si por ello entendemos la libertad del ser humano de vivir su propia vida según su elección, es correcto, siempre y cuando el individuo no violente las normas de conducta generalmente aceptadas por la sociedad donde ha de vivir esa vida. Entonces luchemos por ello. Pero si se entiende el "libre albedrío" por la posibilidad de hacer cualquier cosa que nos venga en gana
aunque esto sea violar las normas de conducta de una sociedad determinada, entonces habrá que recordar que para eso existen leyes que regulan la acción de los individuos.

Las normas éticas adoptadas por una sociedad pueden o no estar escritas. Con el surgimiento del Derecho suelen estar estipuladas como leyes, sobre todo en el Código Penal, pues son principios morales que la sociedad no puede darse el lujo de que se violen y se elevan a la categoría de ley para poder sancionarlos: no robar, no matar, etc.

Juan Marinello decía que toda gran libertad implica una gran responsabilidad. Es evidente que allí donde las libertades son mayores la responsabilidad social de los que las ejercen debe ser también mayor. Está claro que el derecho de un individuo tiene como límite justo el lugar donde
comienza el derecho de otro semejante. Si sabemos ser responsables nuestra libertad será siempre ilimitada.

Decía Martí que si hubiera tenido tiempo, el libro que le gustaría escribir para dejarlo como legado de su paso por el mundo llevaría por título "El concepto de la vida", donde revelaría ese cúmulo de verdades esenciales que caben en el ala de un colibrí y son, sin embargo, la clave de la paz pública, la elevación espiritual y la grandeza patria. Para él los dos grandes problemas humanos son la conservación de la existencia, y el logro de los modos de hacerla grata y pacífica. Todo lo demás lo hemos puesto por añadidura nosotros mismos, depositando nuestra felicidad en lugares casi siempre equivocados, efímeros, para luego quejarnos de que tenemos felicidades efímeras, y terminar al cabo asumiendo con indolencia un refranillo que reza que "la felicidad no existe, lo que existen son momentos felices". Es claro que si no somos capaces de darnos cuenta de lo imprescindible que es para nuestra vida respirar aire puro, y en cambio nos morimos de angustia porque no tenemos determinada marca de zapato, nos vamos a ir del mundo un día cualquiera sin haber conocido la sensación constante de la felicidad.

Pero aún para los escépticos, debemos repetir, a costa de ser tomados por románticos, aquella verdad tremenda del Apóstol: "*La felicidad existe sobre la tierra, y se la conquista con el ejercicio prudente de la razón y la práctica constante de la generosidad".*

* "Ser bueno es el único modo de ser dichoso. Ser culto es el único modo de ser libre. "*

Honoris Causa para Roque Dalton 'El turno del ofendido'


Honoris Causa para Roque Dalton 'El turno del ofendido'

Por: COLATINO
Fecha publicación: 28/04/2008



«Cuando yo muera, sólo recordarán mi júbilo matutino y palpable, mi bandera sin derecho a cansarse, la concreta verdad que repartí desde el fuego, el puño que hice unánime con el clamor de piedra que exigió la esperanza». (Fragmento del poema: Hora de la ceniza. Roque Dalton)

En estos días de abril, en los que el mar se empecina en parir tsunamis, el cambio climático hace lo suyo con las estaciones del año, y la globalización cabalga como bestia en celo por el mundo, mientras los unos devoran a los otros, y la pobreza y asimetrías sociales se erigen como signos implacables de los nuevos tiempos, le ha llegado a Roque otra vez su turno del ofendido.

Un grupo de académicos de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales de la Universidad de El Salvador, encabezado por el Decano de la Facultad de Jurisprudencia, Dr. José Humberto Morales; el Director de Escuela de Ciencias Jurídicas, Dr. Julio Olivo Granadino; el Jefe de la Pinacoteca 'Roque Dalton', Mario Castrillo; el Jefe de Ciencias Políticas, Lic. Erick López, y otros, propusieron a la Junta Directiva de esa Facultad la aprobación de un acuerdo que respaldara la propuesta de otorgar al poeta y estudiante de derecho, Roque Dalton García, el título de Doctor Honoris Causa en forma póstuma, así como la aprobación de la publicación de sus obras completas por la Editorial Universitaria.

Así, el 22 de abril, en un acuerdo sin precedentes, la Junta Directiva de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales, aprobó la propuesta de respaldar institucionalmente la concesión del título de Doctor Honoris Causa para Roque Dalton García, para lo cual será necesario elevar ante el Consejo Superior Universitario, la referida propuesta, a fin de obtener la respectiva aprobación.

Roque Dalton fue un poeta muy prolijo, entre sus publicación figuran: Mía Junto a los Pájaros (San Salvador, 1958), La Ventana en el Rostro (México, 1961), El mar ( 1962), El Salvador (monografía, La Habana, 1963), César Vallejo (ensayo, La Habana, 1963), El otro mundo (1963), Poemas (San Salvador, 1967), El intelectual y la sociedad (conversaciones con escritores, México D. F., 1969, Los pequeños infiernos (Barcelona, 1970), ¿Revolución en la revolución?, Las historias prohibidas del Pulgarcito (México D. F., 1974), Pobrecito poeta que era yo (Costa Rica, 1976), Poemas clandestinos (San Salvador, 1980), Los helicópteros (escrita en colaboración con el escritor, Dr. José Napoleón Rodríguez Ruiz, San Salvador, 1980), Un libro rojo para Lenín (Managua, 1986), Un libro levemente odioso (México, 1988), entre otros.

Más allá de sus méritos literarios, resalta su aporte en la universidad y sociedad, como miembro de la Asociación de Estudiantes Universitarios (AEU) 1954, fundador del Círculo Literario Universitario en 1956, Secretario de la primera Comisión del Congreso Estudiantil Universitario.

Además, se desempeñó como Codirector de Ciencias Jurídicas y Sociales (1959), de la Revista Estudiantil de la Facultad de Derecho de la Universidad de El Salvador, Corredactor de los periódicos y revistas: La Jodarria, Opinión estudiantil, La Universidad, La Pájara Pinta, Vida Universitaria, entre otros.

Asimismo, su incorporación a la lucha revolucionaria y la conquista de mejores condiciones sociales y económicas para los salvadoreños, le costó persecución, prisión, exilio, dolor y muerte.

Roque Dalton fue miembro del Partido Comunista y luego del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y más tarde símbolo en la lucha de la Resistencia Nacional (RN) y el brazo armado de esta, las FARN.

Su obra ha sido objeto de investigaciones científicas en los niveles de pregrado y postgrado en maestrías y doctorados en el ámbito nacional e internacional.

Gran conspirador e inspirador de generaciones de jóvenes que asumieron como bandera de lucha, la conquista de una sociedad con justicia social en nuestro país. En su nombre se han institucionalizado premios: Medalla Cultural Anual (México D. F.), Premio Latinoamericano de Cine 'Roque Dalton', establecido por Radio Habana Cuba. También llevan su nombre: la Pinacoteca de la Universidad de El Salvador, el Teatro Municipal de Cámara (barrio San Miguelito, San Salvador), entre otros.

Su obra ha logrado trascender las barreras ideológicas nacionales, al ser reconocido por la Asamblea Legislativa de El Salvador, mediante Decreto No. 186, del 11 de diciembre de 1997, como: «Poeta Meritísimo de la República», incorporando el estudio de su obra en los programas oficiales.

La propuesta de Honoris Causa que la universidad ya ha entregado a otras luminarias del pensamiento latinoamericano, como Saramago, Freire, Galeano, entre otros, se vuelve un poema urgente que la universidad y la sociedad salvadoreña, le han quedado debiendo al poeta, intelectual, guanaco, revolucionario y estudiante de derecho.

Marcos: "Cristina Kirchner representa la imagen que quieren los de arriba"

29.04.08
Marcos: "Cristina Kirchner representa la imagen que quieren los de arriba"

x El Universal

[Versión completa] En entrevista difundida por el diario El Universal, el Subcomandante Insurgente critica a Garzón, a López Obrador y a otros políticos, no sólo a Chávez, como subrayan otros medios reproduciendo la versión de EFE
"EPR dará mucho de qué hablar"
Las opiniones del subcomandante sobre intelectuales y políticos se plasman en el libro Corte de caja, del que se publica un extracto Laura Castellanos
El Universal - Lunes 28 de abril de 2008


Te voy a decir algunos nombres-- le propuse para conocer su opinión sobre algunos personajes de la intelectualidad y la política.

--Héctor Aguilar Camín.
--Un mercenario de la letra.
--Carlos Monsiváis.
--El crítico más filoso y brillante de la derecha en México.
--¿También rompieron lanzas con él?
--Monsi tomó distancia con nosotros desde hace mucho tiempo, desde la época de los vascos --es decir cuando pretendió intervenir infructuosamente en el conflicto entre ETA y el Estado español--. Siempre se había mantenido a cierta distancia de nosotros. Monsi es un militante de la ciudadanización, y las armas lo confrontan mucho.
--José Saramago.
--Él hizo un compromiso con los pueblos cuando se acercó para acá. Fue muy importante en una época, y tomó distancia. Nosotros pensamos que no es por razones políticas, tal vez sea por su salud, o a causa de sus actividades. Finalmente Chiapas está muy lejos de las islas Canarias.
--El juez Baltasar Garzón-- uno de los contendientes en la polémica de la ETA.
--Es un mercenario de la justicia, esos que piensan que la justicia es un fenómeno mediático como lo es la política. Él se luce mucho con que persigue a la ETA y en realidad lo único que ha hecho es perseguir a la cultura vasca. Ha cerrado periódicos, encerrado periodistas, y él lo presenta como parte del combate al terrorismo.
--Eduardo Galeano.
--La figura literaria de Hispanoamérica que más admiro. Cuando sea grande, quiero ser como él. No lo vayas a poner ahí, pero es un chingón. No pongas malas palabras, porque todo mi glamour de gente culta se va a ir a la chingada.
--Angelina Jolie.
--Mi amor imposible.
Políticos de América Latina
--Evo Morales.
--Tiene el gran reto de demostrar que es falso que el poder transforma a la gente honesta. Y nosotros decimos que el resultado de esa prueba va a depender del ancla que lo sustenta... el movimiento indígena. Su cercanía, su distancia con el movimiento que lo llevó al poder va a determinar su futuro. Todavía es pronto para hablar de Evo. A diferencia de Lula, que luego luego [enseguida] desilusionó, Evo todavía tiene el beneficio de la duda.
--Hugo Chávez.
--Está parado con un pie entre una política mediática, con improntas de caudillo, y con otro pie en el movimiento que está despertando en Venezuela, que está efectuando un proceso de transformación fuerte. Venezuela y Bolivia nos llaman la atención, y tratamos de seguirlos de cerca, sin explayarnos mucho hasta no saber bien qué onda, si es posible que un político se mueva al mismo tiempo "abajo y arriba". Nosotros decimos que en México no se puede. No decimos que en otras partes no se pueda. Pero vemos un problema: a veces nos enteramos de lo que pasa arriba, y otras no. Porque la historia que viene de arriba siempre viene editada por el protagonista, sea Chávez, Morales, López Obrador, o el que esté en esa historia. Y cada uno decide con quién saldar cuentas. A esto respondió el EZLN con la Sexta Declaración: ¿con quién vamos a saldar cuentas?, ¿con los intelectuales, artistas y científicos progresistas?, ¿o con la gente como nosotros? López Obrador respondió a esa pregunta, Chávez la responde a su modo, Evo Morales también, los Kirchner, cada quien dice con quién le interesa saldar su historia, y a eso le apuestan. Si no van a quedar bien con el de abajo, no les importa.
--Cristina Fernández de Kirchner.
--Es la prueba de la política como fenómeno mediático. Ella representa la imagen que quieren los de arriba para el gobierno de toda América Latina. Mientras no se alteren las políticas económicas, está bien. Lo que ellos buscan es gobernantes que a diferencia de las dictaduras de los setenta controlen y reorienten la movilización social, y que se siga adelante con el proceso de destrucción, en este caso en Argentina.
--Fidel Castro.
--Fidel Castro es una pregunta fuerte para los historiadores. Es un hombre excepcional en todos los sentidos. Se puede criticar su lugar en la lucha del pueblo cubano, pero no se le puede negar. Quienes pensamos que los grandes procesos históricos son obra de pueblos enteros, no de individuos, no podemos negar que a veces aparecen hombres excepcionales. Uno de ellos es Fidel Castro. Otro es El Che.
--El Che.
--El Che se nos adelantó. Es el hombre de una generación que todavía no acaba de nacer. Y no me refiero a su lucha revolucionaria, sino al modelo ético de un ser humano dedicado a los demás. Y es que ni siquiera el cristianismo lo ha planteado de esa forma, y no sólo eso, sino las consecuencias que resultan de esa forma de pensar. Muchos dicen que la muerte salvó al Che de la desilusión, que, de no haber muerto, sería como cualquier otro. El hecho de su muerte marca su historia, por las circunstancias que la rodean, se discute si muere como un idealista o un utópico, y se olvida lo que había hecho antes.
Grupos armados del continente
--Las FARC.
--Las FARC tienen el problema de una campaña mediática en su contra, que los quiere ubicar como un grupo ligado al narcotráfico. La situación en Colombia es muy compleja, como la vemos nosotros, porque no sólo son dos fuerzas, las FARC y el gobierno colombiano, hay otros grupos guerrilleros como el ELN, y paramilitares de los grupos de autodefensa civil. No podemos nosotros avalar o condenar. No acostumbramos juzgar a otros grupos armados de México o América Latina.
--¿Y el EPR?
--El EPR surge de la fusión de varios grupos. Aparece públicamente con la gran maniobra militar de Huatulco, Oaxaca, y volvemos a saber de ellos hasta que denuncia la desaparición de dos de sus militantes y actúa contra las instalaciones de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad. Demuestra no sólo a un grupo homogéneo y fuerte que lleva mucho tiempo activo. Parece que prevalece el grupo fundador, que tiene unos métodos de operación difíciles de contener, porque una cosa es enfrentarte a un enemigo cuando sabes dónde está y otra a pequeños grupos dispersos, y no se necesita a un grupo muy grande para realizar las acciones contra Pemex y la Comisión. Nosotros diferimos completamente de esa estrategia, no en cuanto al carácter armado. Nosotros optamos por el trabajo de organización y ellos más por la acción militar. No digo que no tengan base social, pero no es reconocida. En todo caso, igual pueden decir ellos: "pues no tenemos base porque si tuviéramos nos la van a golpear". El EPR va a dar mucho de qué hablar en los próximos años.
--¿Por qué lo piensas? -- le pregunté intrigada.
--Porque ha tenido éxito. Fíjate, el EPR tuvo lo que no tuvimos nosotros en 94. En 94 todos fueron unánimes a la hora de apoyar nuestras causas, pero se dijo que la vía armada no era el camino. Y el EPR no recibió una condena unánime por las bombas.
Postura ante la vía armada
--¿Piensas que los actos de sabotaje del EPR les redituaron simpatía?
--Pienso que debido a la situación del país, acciones de ese tipo despiertan simpatías. La fragilidad de Calderón también contribuye a que eso provoque simpatías.
--En un primer momento ustedes vieron hasta con recelo la irrupción del EPR. Cada organización ha seguido su propio camino, pero hubo una especie de intercambio epistolar en septiembre del 2007, cuando el EZLN cancela La Otra Campaña para no ensombrecer la denuncia del EPR por la desaparición de sus dos militantes.
--Cuando ellos aparecieron nosotros no dijimos nada. Un periodista nos preguntó al respecto, y dijimos que la legitimidad del EPR la tenían que ganar con su pueblo. El EPR lo interpretó como una crítica, como si cuestionáramos su legitimidad, y en una entrevista, el EPR dijo que no se podía hacer la revolución con poesía, y que iban a apoyarnos cuando se rompió el diálogo. Y dijimos: "no, no queremos acciones de apoyo porque estamos por caminos diferentes, porque ustedes plantean la toma del poder y nosotros no. Y aunque ustedes ganen y tomen el poder, vamos a estar contra ustedes, si no se cumplen las demandas de los pueblos indios".
--¿Y no han tenido ningún contacto político militar?
--No, ni siquiera cuando se rompía el diálogo. Antes del alzamiento zapatista hubo intentos de acercamiento al PROCUP, pero lo rechazamos. Y ahora hay incluso menos posiblidades, porque no le podemos decir a la gente que estamos por una vía pacífica y al mismo tiempo figurar como partidarios de otra, la militar. Sería irresponsable de nuestra parte.
--¿Tienen contacto con alguna de sus ramificaciones?-- insistí.
--Con ninguno de los grupos armados de México ni del mundo.
--Tendencia Democrática Revolucionaria (TDR) ha manifestado simpatía por el EZLN en sus comunicados -- una de las escisiones del EPR.
--Tendencia y ERPI (Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente, una escisión más) han dicho que saludan a La Otra Campaña, pero no se meten ni nada. Además, todos ellos están en el dilema de tener ese "arriba" y "abajo". Es decir, le dieron el beneficio de la duda a López Obrador, cuando nosotros dijimos que no. Esa es la diferencia fundamental. Ellos dicen que sí se puede estar en el "arriba" y "abajo", que hay gente honesta arriba, y nosotros decimos que no es cierto, que allá arriba no se puede hacer nada. Sin embargo, ninguno de ellos interfiere en La Otra Campaña, no se meten, ni sabotean ni prestan apoyo.
zapateando.wordpress.com