http://granma.co.cu/secciones/cartas/carta544.htm
En los primeros días del mes de enero, mientras intentaba revisar mi correo por Yahoo, encontré un artículo escrito por un articulista de Reuters llamado Jeff Frank, con el siguiente título:
Cuba festeja los 50 años de Revolución sin Fidel Castro
Y en su primer párrafo nos dice nuestro "desinformado" articulista:
"Cuba festejó el jueves el 50 aniversario de la Revolución sin su principal protagonista, Fidel Castro, y bajo la consigna de que el sistema socialista que edificó pese a la hostilidad de Estados Unidos es más fuerte que nunca."
¿Quién le dijo a este señor que Fidel no estaba?
¿Será que no acaban de entender que en cada minuto transcurrido desde el triunfo revolucionario, en cada obra social levantada, en cada acción desarrollada por el pueblo para levantar este edificio moral, en cada consigna enarbolada, en cada gota de sudor, en cada sacrificio hecho, en cada acción solidaria desplegada, en cada revolucionario caído por defender esta inmensa y genuina obra cargada de optimismo y de dignidad, en cada conmemoración de cualquiera de las organizaciones políticas y de masas que ha creado la Revolución: está Fidel presente?
¿Será que su ceguera intelectual no le permitió observar que cada palabra expresada por nuestro Presidente Raúl Castro, hermano de lucha y de sangre de Fidel, llevaba impregnada el espíritu de nuestro Caguairán?
¿No oyó las intervenciones de los pioneros, de los jóvenes universitarios, de los trabajadores?
¿No escuchó el mensaje enviado por los Cinco Héroes cubanos presos injustamente en las cárceles del imperio?
Señor Jeff Frank, creo que la historia de nuestro país ha demostrado con creces que la presencia física de un hombre de gran talla moral no es necesaria para sentirlo presente.
En nuestro cotidiano andar jamás nos han dejado solos Céspedes, Agramonte, Maceo, Mella, Frank País, Camilo, el Che y muchos otros que tanto han legado a la historia Patria.
En la obra de Fidel nunca han dejado de estar presente las enseñanzas de su maestro, José Marti.
Él, su mejor discípulo, ha sabido trasmitir su sabiduría, su modestia, su sencillez, su sensibilidad, su espíritu de lucha, de rebeldía, de sacrificio y de justicia, su humanismo, su altruismo, a cada generación de revolucionarios que se ha formado en estos cincuenta años de victorias y las que se seguirán formando en los próximos cincuenta años de esta Revolución.
Estimado Jeff Frank solo me resta recordarle que en su propio artículo usted refiere, y cito:
"En un discurso de 35 minutos Raúl Castro evocó varias veces entre vivas y aplausos a su hermano."
Usted mismo se tiene que haber dado cuenta que Fidel estaba presente en ese acto, en ese pueblo que lo reconoce como el líder indiscutible de esta Revolución y que el propio Raúl ha dicho que es el único Comandante en Jefe de este proceso revolucionario.
¡Ah! Le aclaro, nunca Raúl al evocarlo hablaba de Fidel su hermano, siempre se refirió a Fidel el Comandante en Jefe o simplemente a Fidel, como le dice su pueblo.
Para la próxima vez le aconsejo que escoja bien el titulo de su trabajo, porque este tiene que estar en correspondencia con el contenido del mismo y creo, Jeff, que la intención falló.
Fidel si estaba y seguirá estando en la obra imperecedera de esta gran Revolución.
Lic. Luis Rubén Valdés Díaz
En los primeros días del mes de enero, mientras intentaba revisar mi correo por Yahoo, encontré un artículo escrito por un articulista de Reuters llamado Jeff Frank, con el siguiente título:
Cuba festeja los 50 años de Revolución sin Fidel Castro
Y en su primer párrafo nos dice nuestro "desinformado" articulista:
"Cuba festejó el jueves el 50 aniversario de la Revolución sin su principal protagonista, Fidel Castro, y bajo la consigna de que el sistema socialista que edificó pese a la hostilidad de Estados Unidos es más fuerte que nunca."
¿Quién le dijo a este señor que Fidel no estaba?
¿Será que no acaban de entender que en cada minuto transcurrido desde el triunfo revolucionario, en cada obra social levantada, en cada acción desarrollada por el pueblo para levantar este edificio moral, en cada consigna enarbolada, en cada gota de sudor, en cada sacrificio hecho, en cada acción solidaria desplegada, en cada revolucionario caído por defender esta inmensa y genuina obra cargada de optimismo y de dignidad, en cada conmemoración de cualquiera de las organizaciones políticas y de masas que ha creado la Revolución: está Fidel presente?
¿Será que su ceguera intelectual no le permitió observar que cada palabra expresada por nuestro Presidente Raúl Castro, hermano de lucha y de sangre de Fidel, llevaba impregnada el espíritu de nuestro Caguairán?
¿No oyó las intervenciones de los pioneros, de los jóvenes universitarios, de los trabajadores?
¿No escuchó el mensaje enviado por los Cinco Héroes cubanos presos injustamente en las cárceles del imperio?
Señor Jeff Frank, creo que la historia de nuestro país ha demostrado con creces que la presencia física de un hombre de gran talla moral no es necesaria para sentirlo presente.
En nuestro cotidiano andar jamás nos han dejado solos Céspedes, Agramonte, Maceo, Mella, Frank País, Camilo, el Che y muchos otros que tanto han legado a la historia Patria.
En la obra de Fidel nunca han dejado de estar presente las enseñanzas de su maestro, José Marti.
Él, su mejor discípulo, ha sabido trasmitir su sabiduría, su modestia, su sencillez, su sensibilidad, su espíritu de lucha, de rebeldía, de sacrificio y de justicia, su humanismo, su altruismo, a cada generación de revolucionarios que se ha formado en estos cincuenta años de victorias y las que se seguirán formando en los próximos cincuenta años de esta Revolución.
Estimado Jeff Frank solo me resta recordarle que en su propio artículo usted refiere, y cito:
"En un discurso de 35 minutos Raúl Castro evocó varias veces entre vivas y aplausos a su hermano."
Usted mismo se tiene que haber dado cuenta que Fidel estaba presente en ese acto, en ese pueblo que lo reconoce como el líder indiscutible de esta Revolución y que el propio Raúl ha dicho que es el único Comandante en Jefe de este proceso revolucionario.
¡Ah! Le aclaro, nunca Raúl al evocarlo hablaba de Fidel su hermano, siempre se refirió a Fidel el Comandante en Jefe o simplemente a Fidel, como le dice su pueblo.
Para la próxima vez le aconsejo que escoja bien el titulo de su trabajo, porque este tiene que estar en correspondencia con el contenido del mismo y creo, Jeff, que la intención falló.
Fidel si estaba y seguirá estando en la obra imperecedera de esta gran Revolución.
Lic. Luis Rubén Valdés Díaz
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