viernes, febrero 06, 2009

María Teresa Vera: una gracia, un carácter


Por Arianna Corona y Jaime Masó (estudiantes de Periodismo).
Publicado: 5 de febrero de 2009

En cierta oportunidad, Silvio Rodríguez -fundador del movimiento cubano de la Nueva Trova- dijo que María Teresa Vera (1895-1965) "… a la hora de cantar era seca y sin vibrato, tocaba las notas y solo se prolongaba para glisar de un tono a otro. Esto le imprimía una gracia, un carácter".

Pero, ¿qué elementos apoyan tal afirmación?

Nacida un 6 de febrero, hace 114 años, en Guanajay, poblado de la actual provincia de La Habana, realizó sus estudios de guitarra con José Díaz y el fructífero compositor Manuel Corona.
Fue en el teatro de variedades "Politeama Grande", ubicado en la Manzana de Gómez, frente al habanero Parque Central, donde la joven María Teresa hizo su primera presentación con el tema "Mercedes", de Corona. De este último compositor popularizó entre otras las canciones "Longina" y "Santa Cecilia".

En 1915, María Teresa era una consagrada en el campo musical, en este período une su voz a la de Rafael Zequeira con quien formaría uno de los mejores y más duraderos dúos registrados en la historia musical cubana.

Sobre esto la propia María Teresa expresó: "Nos dedicábamos especialmente a la canción cubana. Zequeira y yo hicimos más de cinco viajes a los Estados Unidos (…) Bien acoplados, identificados con nuestra misión artística, enseguida nos popularizamos dentro y fuera de Cuba. Nuestro dúo fue un éxito popular, aunque sea inmodesto decirlo".Así fue.

Cuando Rafael Zequeira murió en 1924, María Teresa pasó a formar parte de otros dúos y cuartetos. Posteriormente en 1926 funda el Sexteto Occidente, integrado además por Ignacio Piñeiro, autor del popular tema "Échale salsita". Con esta agrupación viajó por última vez a Nueva York.

María Teresa desarrolló una fructífera labor en el mundo artístico, marcando de manera singular la canción cubana, de ahí que fuese catalogada como la más alta expresión femenina de la trova tradicional de nuestro país.

Sus últimas presentaciones tuvieron lugar en 1961, año en que se grabó una colección de canciones suyas, que fue reeditada en 1999, bajo el título Las canciones de Maria Teresa Vera, como homenaje a su dedicación a la canción. En 1962 –ya enferma- decidió retirarse de la escena.

Entre sus obras, figuran los boleros Amar y ser amada, No puedes comprender, Te acordarás de mí, Tu voz, Yo quiero que tú sepas, No puedo amarte ya, No me sabes querer, así como los boleros-sones Dime que me amas y Sólo pienso en ti.

Pero sin lugar a dudas "Veinte años" es la pieza clásica de esta excepcional trovadora. Tema versionado por otros populares intérpretes en diversos países de Latinoamérica.

Que te importa que te ame
Si tú no me quieres ya;
El amor que ya ha pasado
no se debe recordar.

A pesar del tiempo este número mantiene su frescura y el encanto con que fuera compuesta en 1935, al estilo del género habanera.

Contrario a los que muchos piensan el tema no corresponde a la autoría de la también conocida "reina de la vieja guardia". La historia revela a Guillermina Aramburu quien al final de un fatídico proceso amoroso, escribió una letra descorazonada de la cual se arrepintió rápidamente; con la promesa de presentarse como autora absoluta María Teresa la musicalizó.

Han pasado 114 años de su nacimiento y aún su figura representa en grandes proporciones lo típico del cubano, la vega tabacalera y el aroma de los jazmines montañosos.

En su voz no solo están guardados algunos de los temas más queridos de la música cubana, sino su cadencia auténtica, sin traición, sin engolamiento. Sobre todas las cosas, a pesar del tiempo, sobrevive su "gracia" y "carácter".

No hay comentarios.: