Una carta inconclusa para Antonio Guerrero Rodríguez se traspapela entre mis notas de trabajo. Intento culminarla. Hacérsela llegar puede ser un buen regalo de cumpleaños. Mas, sería inapropiado enviarle una misiva personal, cuando suman miles las personas que aclaman por la justicia y la libertad. Tanto de Tony como de sus cuatro compañeros presos por luchar contra el terrorismo.
«Cinco abrazos. ¡Venceremos!». Así se despide de sus queridos amigos en Hojas del Diario. Fueron textos escritos desde la prisión FCI Florence. Se hicieron públicos gracias a la solidaridad, durante el mes de junio de este año. Varios de ellos están disponibles en el sitio digital Cubadebate.cu.
Más que escribir conversa. Revela su pasión por el fútbol, los recuerdos de sus condiscípulos en la escuela vocacional Vladimir Ilich Lenin, o con quienes trabajó en el aereopuerto de Santiago de Cuba.
Cada párrafo trae la sensibilidad de un hombre que a sus 52 años —cumplidos hoy— no pierde la capacidad de admirar la naturaleza. Para corroborarlo basta leer:
«Chapearon en el área exterior que da a mi ventana. La chapeadora no llegó hasta las florecitas violetas, (…). No obstante, en el patio grande de recreación, descubrí una manada de florecitas blancas, con forma de campanitas, bien pequeñas, pero sumamente hermosas. La gente le pasa por el lado como algo insignificante. Yo las admiro, no solo su resistencia a este clima tan seco, sino su forma de dar luz, belleza y vida, con esa paz y esa armonía que tanto deseamos para este mundo», escribió el 10 de junio pasado.
Bien lo ha dicho su mamá, Mirta Rodríguez: «Siempre fue un niño bueno, pacífico, plácido, lo crié con mucha facilidad». Tanta nobleza se mantiene a pesar del injusto encierro. Queda al descubierto en su obra poética. Sus libros, Desde mi altura y Poemas confidenciales rompen los muros de silencio sobre el amañado proceso judicial.
En el segundo, dedicado al centenario del natalicio del poeta chileno Pablo Neruda lo expresa con belleza única. Como solo pueden hacerlo quienes están dispuestos a darlo todo a favor de las causas justas:
«He imaginado muchas veces al joven Neruda en su cuarto de la pensión de estudiantes de la calle Maruri 513, escribiendo sus poemas, mientras en una celda oscura y fría yo escribía los míos, convirtiéndolo a él en mi primer confidente. Hay algo muy significativo que tenemos en común: la mezcla en estos poemas de la naturaleza arrolladora de la Patria amada: mujer y madre mayor siempre presentes en mi poesía. He escrito estas palabras y estos versos a nombre de cinco hombres que estamos inquebrantablemente unidos por idénticos principios, forjados en la obra hermosa, digna y heroica de nuestro pueblo (…). A nuestra Patria a diario dedicamos estos versos del Poema 18 del eterno Pablo Neruda: Aquí te amo y en vano te oculta el horizonte./Te estoy amando aun entre estas frías cosas.»
REGRESARÁ
Ambos poemarios del Héroe de la República de Cuba han sido musicalizados por trovadores cubanos y extranjeros. Uno de ellos posee dos versiones muy difundidas en las voces del Guajiro Natural, Polo Montañez y Vicente Feliú.
La misma idea de retornar a la Patria aparece en el poema IV de su segundo libro, prologado por Ángel Augier y presentado en el IX Festival Internacional de Poesía de La Habana 2004. Una de sus estrofas dice:
No he olvidado tus grietas y tus cumbres
ni he apartado tu dignidad ilesa.
Claro que volveré, uno siempre regresa
si el profesado amor no es tan sólo costumbre.
Como aseguró Leonard Weinglass —uno de los abogados que representa a los Cinco cubanos presos arbitrariamente en los Estados Unidos—, en una entrevista concedida a la emisora Radio Habana Cuba, en septiembre último, Antonio Guerrero Rodríguez cumple una condena de 21 años. Pero se debe al juicio de resentencia efectuado hace dos años, en el que se le disminuyó la exagerada condena inicial de una cadena perpetua más 15 años de presidio.
Significa que en unos 7 años o incluso menos, quedaría libre para regresar a su país. «Sin embargo, Antonio, al igual que Gerardo, también fue víctima de la conducta indebida del gobierno que pagó a reporteros por artículos perjudiciales para los Cinco. Por ello, Antonio reclama lo mismo que Gerardo (…), y presentará su Hábeas Corpus en la primera semana de noviembre (…)», refiere Weinglass
.
Un evidente matiz político rodea el proceso jurídico más extenso en la historia de la abogacía norteamericana. Las violaciones a la legalidad se hacen cada vez más evidente. Al mismo tiempo voces de todo el planeta se alzan en señal de apoyo a la causa defendida por Gerardo, Ramón, René, Fernando y Antonio. En los versos escritos tras las rejas Tony lo denuncia claramente:
Un día a uno lo encierran de repente,
con noches que sólo sirven al silencio.
Te hacen sentir dolido, traicionado,
extraño, fatigado, ausente.Te llevan a un lugar sombrío y frío
donde todo es ajeno, inalienablemente,
salones habitados por el odio
en los que el aire es indiferente.Pero sabes que un día volverán los besos,
la luz se cubrirá de dulce efluvio,
las puertas las cerrarán cadenas
y el calor propagará sobre tu ser su boca
brindándote la eterna primavera.Contra el amor del bueno no hay quien pueda.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario