domingo, febrero 22, 2009

Carta a Margarita


Beatriz Paganini (Desde Santa Fe, Argentina. Especial para ARGENPRESS CULTURAL)

Tengo ante mí tu foto, Margarita Mbywangi.

Has salido en los medios de prensa internacionales.

¿Cómo se pronunciará tu apellido? ¿Mmmmbiuangi?

¿Cómo le agrego tu dulce acento guaraní?

Tenías cuatro años cuando los blancos mataron a tu familia y te llevaron como esclava para servir en las haciendas paraguayas.

Hoy, lo acompañás, con rango de ministra, al presidente Fernando Lugo en la valiente cruzada de gobernar al Paraguay como una nación libre y soberana.

Será a un alto costo; a una lucha diaria por todos los flancos.

¡No más cipayos paraguayos!

¡No más extranjeros dominando Paraguay!

Ahora tenés 46 años. ¡Lástima que tu compatriota Don Augusto Roa Bastos no pueda celebrarlo! Justamente él, exiliado, errante, perseguido por la dictadura.

Yo llegué a conocerlo en Toulousse. Le llevé la carta de Hermenegildo Rosales Prieto, otro paraguayo perseguido, a quien mi tío Ramiro le dio escondite y refugio en la casona de mis abuelos.

- ¡Tío, quiero llevarle esas letras! – le pedí entusiasmada.

Ante mi pedido, tío Ramiro aceptó.

Entonces, decidida, emprendí el viaje.

Toulousse me recibió con una fina y helada llovizna. Esperé en la sala de profesores de la Universidad donde él se encontraba.

Nos presentamos y, caminando nos dirigimos a su escritorio privado.

Espontáneamente le dije la semejanza física que tenía con Don Atahualpa Yupanqui.

_ Somos hermanos en la lucha de perseguidos por nuestros ideales, sobre los derechos inalienables de la Humanidad - me contestó - él con su canto, su guitarra y sus versos, yo con mi pluma y mi docencia. Francia hizo honor a su liberté, ëgalité e igualité al recibirnos y salvarnos de la garra persecutoria y asesina de los que desprecian su suelo patrio, conchabándose al Imperialismo, liberalismo o cualquier neo-ismo de todo lo que sea privilegio para unos pocos.

Asentí con un gesto y él, invitó a sentarnos.

Abrí mi cartera, saqué un sobre y se lo entregué.

Lo abrió y comenzó a leer en silencio.

"Augusto Roa Bastos, es el amigo paisano que me espera en Buenos Aires y yo, Hemernegildo Rosales voy a su encuentro.

Me costó escapar de esas bestias humanoides que castigan mi pueblo. Matan a mis hermanos. Se arrodillan ante los gringos y les venden lo que no es de ellos.

¡Mal venden por treinta dineros la tierra paraguaya!

¡Malaya! ¡Mal paridos!

La estaca que nos clavan, algún día será castigo para ellos.

Me salvó el silbido del Amancio, tal como era la consigna, si venían a buscarme.

Descalzo, salté al vacío desde el techo del rancho y me interné en el monte. Ladraban los perros del Isidro, pero yo corrí. Ladraban los perros de la Nemesia pero yo corría.

Llegué a La Chúcara.

Abrir el portón me fue fácil.

Me acordé que Don Juarez, el capatáz, estaría en la bailanta.

Los perros no ladraron porque me reconocieron.

No fue en vano los pedazos de carne que les daba, cuando llevaba el pedido de "La Mejor y Única.", la carnicería donde tenía mi conchavo de repartidor, mandadero y cualquier otro servicio que se le ocurriera al patrón (hasta que me despidió por afiliarme al sindicato).

Me subí al techo. El tanque de agua estaba a un costado. La tapa, gracias al tata ateo, tenía unas hendijas que me permitieron entrar las manos.

No era mi intención destaparla sino correrla.

Entonces empujé.

¡Puje! ¡Puje! Gritaba la matrona a mi mamá para que viniera al mundo la Zelmira. Y, ahora, con mi puje yo salvo mi vida.

Con fuerza y a su vez medido debía ser el puje porque la tapa no debía caerse. Después de cuatro pujes, calculé que entraba y me metí.

El frío no se me mezquinó. Sentí el sudor caliente como chirriando.

Igualito que chirría el hierro sacado de la fragua y metido en agua fría.

Así sentí mis carnes que hervían con el sudor que, hasta ahí nomás, me estaba chorreando.

Haciendo pié, me alcanzaba tener la cabeza fuera. Cuando se hizo la luz, salí para espiar.

Me metí otra vez por la aparición de unos gurises.

Quedé entumecido, hinchado, con la ropa pegada y ajustada como encogida.

Oí el silbido del Amancio. Esta vez no era Anahí sino Pájaro Campana.

Así habíamos quedado.

Si el silbaba Anahí yo ya estaba escondido.

Si silbaba Pájaro Campana, entonces estate tranquilo Herme, no hay peligro a la vista.

Como no sabía donde estaba, me dijo que se la pasó silbando. Que más silbaba de noche, pero que de día tampoco le hacía asco, por si las dudas.

No me fue fácil contestarle para que se orientara.

Los labios, la lengua, toda la boca no me hacían caso.

Demoré el silbido.

Para peor, cuando el suyo se alejaba yo me sentía desesperar, pero, al fin, pude domar la lengua como he domado siempre al destino que se me quiso torcer en desgracia.

En un momento, silbido y silbido hicieron un solo canto, sin eco.

Bajé. Nos abrazamos.

_ ¡Hermano!- me dijo sólo eso.

Ya estaba oscureciendo, yo lo seguía rengueando, descalzo.

_ No hay naides- me cuenta-han ido pal otro lado a buscar más rebeldes.

Le entendí.

Yo también era un rebelde terrorista.

En el rancho me dió ropa y había un camastro para pasar la noche.

Las alimañas sólo volverían dentro de dos o tres días, después con los pobres infelices que ya torturados en el camino, caerían en los calabozos de Asunción o Clorinda. Si no eran fusilados por el nazi-paraguayo de turno, morirían tuberculosos, locos o de cualquier peste.

El mate me acompañaba cuando estaba solo y en la cabeza maquinaba mi huída hacia Clorinda para enlazar con Misiones.

Pero, al final, fue por agua mi escape.

El Paraná me transportó.

En Entre Ríos, ya avisado, me esperaba un argentino muy caballero, educado como son algunos allá. Con el peinado chato como Gardel.

Me contó que estaba cumpliendo la misión que le había encargado un amigo de mi amigo Roa Bastos.

¡Cha`migo! Este Augusto.

Enfiló, con su fitito, hacia el Túnel que une Paraná con Santa Fe.

Yo nunca había pasado abajo del agua por un túnel.

¡Es de no creer lo que puede la mano del hombre!

Llegamos de noche, después de cruzar un pintoresco puente, que el argentino me dijo que se llamaba Puente Colgante; las luces de la ciudad me recibieron.

Parecía una ciudad tranquila. Cerquita del puente estaba la casa. Nos detuvimos y el argentino me dijo:

_ Amigo, lo voy a dejar en una casa de familia muy conocida de Santa Fe, pero a usted, por ahora, no lo verán. Uno de los hijos, aprovechando que el cabeza de familia está en Europa, lo acogerá en el sótano de su residencia con absoluto silencio. Desde ya confío en su discreción como usted deberá confiar en la buena voluntad que nos mueve a ofrecerle esta especie de salvoconducto.

Entonces, me di cuenta que la Argentina se estaba poniendo peligrosa para la gente al igual que para los paraguayos en su pago.

La mansión era imponente, daba a un boulevard y tenía dos entradas por dos calles porque abarcaba muchísimo terreno.

Cruzamos jardines, fuentes, estatuas, todo rápido, casi a lo oscuro.

Se abrió una puerta y, un indio vestido como cristiano civilizado inclinó la cabeza y nos hizo señas para que lo siguiéramos.

Entramos en una amplia y lujosa cocina, casi, casi de ésas medidas era mi rancho paraguayo.

En un ángulo, entre dos paredes había una puerta que el indio abrió, prendió una luz y se vió una escalera que descendía.

Bajamos.

Llegamos a una enorme despensa y bodega. Allí, volvimos a bajar por otra escalera.

Ese lugar era un lavadero. Pilas de ropa, fuentones, baldes, percheros con ropa colgada y varias planchas a carbón.

Otra vez bajamos y lo que apareció a mi vista, no lo podía creer.

Era una casa lujosa dentro de otra casa.

Jamás en la vida, hasta ese día, tuve frente a mi tanto lujo y comodidades.

Esos muebles fabulosos de maderas desconocidas. El piso alfombrado con distintos tapices que separaban, y unían a su vez, las zonas determinadas para Biblioteca, dormitorio, comedor. Cortinados, visillos, carpetas, floreros, esculturas, cuadros, arañas, muebles todo acorde con una decoración palaciega.

En menos de una semana pasé de fugitivo con riesgo de morir ahogado en un tanque de agua en el techo de la Estancia LA CHÚCARA del Paraguay, a huésped refugiado en un sótano lujoso y simulado de Santa Fe.

Mi agradecimiento a Don Augusto, viene desde mi infancia.

Su mamá ayudó a mi mamá y él, me enseñó a comprender el porqué estamos sometidos en nuestra querida tierra paragüaya.

Recuerdo que, hace cinco años desde Buenos Aires me ayudó con los gastos para que viajara hasta allí.

Vivíamos en una pensión. El vendía libros y yo vendía ropa.

Pero, en el 73 mi madre enfermó y quise ir a verla. Pasó el tiempo, me quedé con ella y no pude volver a Buenos Aires.

Ahora, llegando el 75, me avisó que corría peligro en Paraguay, cosa que yo ya había advertido.

Por teléfono le dije que iba y me explicó que dejara todo en sus manos y que yo sólo le avisara por donde iban mis pasos.

En nuestra última llamada desde Paraná me contó que ya en la Argentina estaban persiguiendo y matando como en Paraguay.

La triple A de José López Rega, el minitro de Isabel Martinez de Parón, estaba matando hasta en las calles de Buenos Aires.

Y, aquí estoy. Mañana a la noche me llevan a Rosario.

Dejo estas líneas como agradecimiento a la familia Quintana que me ayudó y es la dueña de este chalet. Algún día, en tiempos mejores para la Humanidad, volveré para agradecer personalmente.

A lo mejor, ese día, conoceré a los niños que ríen, corren y cantan allá arriba; donde ahora, no me ven ni yo los veo.

Dios y el Tata Ateo los bendiga, lo digo y lo firmo:

EN UN DIA DE AGOSTO DE 1975 Hermenegildo Rosales Prieto"

A medida que Don Augusto leía, su cara de esfinge india, seria, como tallada en madera y piedra comenzaba a transformarse con un gesto de tristeza, que por momentos le obligaban a interrumpir la lectura.

Cuando terminó, se levantó y con paso pausado se acercó a la biblioteca. Sacó un bibliorato. Lo abrió. Se volvió a sentar, pasando las hojas buscando, evidentemente, algo importante.

Al encontrarlo me dijo - Lea usted, por favor. -

Sus manos temblaban cuando me acercó las páginas señaladas.

Era un recorte de un diario de Rosario que consignaba lo siguiente:

Dos delincuentes abatidos
AGENCIA E.F.E
25 de agosto de 1975.
Ayer, en horas de la noche, luego de un asalto a mano armada en el interior de la joyería El Diamante, dos delincuentes fueron abatidos cuando intentaron huir cubriéndose la retirada a los tiros. Identificados, los malvivientes resultaron ser: Hugo García argentino, de 25 años y Hermenegildo Rosales Prieto, paraguayo, de 38. Ambos con pedido de captura y frondoso prontuario delictivo. En el auto abandonado, se encontraron armas de guerra y documentación falsificada.

Lo miré consternada. Hubo una pausa.

Luego, él me dijo:

- Esta hoja del diario me la dió Zelmira, la hermana menor de Hermenegildo, hace tres meses cuando yo fui a Paraguay a ultimar los detalles de mi vuelta. Lo extraño del asunto, fue que el recorte se lo mandaron a su domicilio en Paraguay a los dos días de su publicación. Entonces ella me dijo no creer que su hermano hubiera terminado en eso, como un delincuente. ¡No mi`hija! la interrumpí. Yo pongo las manos en el fuego por tu hermano. Él iba a mi encuentro, pero escondiéndose. Le expliqué lo que era el Plan Cóndor y cómo se había extendido como un virus exterminador, matando mujeres, hombres y niños. Que hasta había monjas y curas corriendo la misma suerte.

A demás, estaba demostrada la relación internacional de los represores. ¿Por qué le mandaron la noticia del diario a ella? Era para meter miedo o sembrar dudas. Daba igual. Mientras tanto, yo lo esperaba, pero no tenía noticias, era como si se lo hubiera tragado la tierra, y me tuve que ir solo a Europa con la intriga que permanecía en mi corazón, dado que su rastro se perdió cuando salió del refugio de Santa Fe. Ahora, con las letras que él dejó escritas, está todo claro: ES OTRO DESAPARECIDO, aunque esta vez lo hacen pasar por delincuente. Hoy mismo le hablaré por teléfono a Zelmira y le diré que le llevo la última carta de su hermano.

Fue la primera y última vez que nos vimos con Don Augusto.

Él volvió definitivamente al Paraguay, falleciendo en 1995. Yo sigo viviendo en Santa Fe.

El chalet ya ha sido demolido. Los ladrillos que formaron sus paredes fueron mudos testigos de los sentimientos más nobles y más mezquinos de la condición humana, algo así como los acontecimientos de la vida misma. Como la historia de mi país, Argentina con sus utopías, heroísmos, venganzas, traiciones, prejuicios, patriotismo, renunciamientos… la historia misma de la humanidad toda.

Por eso, esta carta te la dirijo a vos: MARGARITA MBYWANGI. Es como si Don Augusto te dejara la posta en tus manos y en todas las manos de los paraguayos patriotas.

Varios cientos viven en mi país, Argentina, otros cientos repartidos por América, que sus luchas y exilios no hayan sido en vano.

Un fraterno abrazo.

VERÓNICA QUINTANA

1 comentario:

Anónimo dijo...

LASTIMOSAMENTE, HACE RATO QUE A MARGARITA LA EXPULSARON DEL GOBIERNO DEL FALSO OBISPO DE LOS POBRES. PARA MÁS DATOS, VER:

POLIZONTE EN LA IZQUIERDA:
Diga lo que diga la falsa izquierda de las ONGs derechistas financiadas por el imperio, la realidad imposible de ocultar es que el obispo Fernando Lugo ganó las elecciones del 20 de abril con notorio respaldo de la embajada norteamericana ocupada por James Cason, y con el apoyo de la prensa vinculada a la Secta Moon. Su plataforma política la constituyeron grupos de activistas vinculados a ONGs derechistas relacionadas con el NED, IAF, USAID, etc., neoliberales como el sector de Luis Alberto Castiglioni y los partidarios del desaparecido dictador Alfredo Stroessner, todos ellos disidentes del partido colorado que presentó una candidatura que no era del agrado de estos grupos de extrema derecha.
Algunos grupos que se autoproclaman izquierdistas alegaron razones de coyuntura para seguir como furgón de cola la candidatura del obispo. La presencia de ellos constituye parte del libreto de la derecha, que los utiliza para fustigar sobre supuesta infiltración marxista en el gabinete del clérigo, aunque en realidad esté constituído en su totalidad por personeros del neoliberalismo y la embajada norteamericana.

IZQUIERDA GESTADA EN LA EMBAJADA NORTEAMERICANA

La totalidad los integrantes del gabinete del obispo Fernando Lugo provienen del sector de las ONGs financiadas por la embajada norteamericana. Se cuentan entre ellos a Gloria Rubín (referente en Paraguay del NED y la CIA), Camilo Soares (beneficiario de fondos de IAF y NED, favorecido del gobierno de George W. Bush) Rafael Filizzola (signatario de acuerdos con Alvaro Uribe a instancias de la ex operadora del plan Colombia Liliana Ayalde), Karina Rodríguez (de la Casa de la Juventud, que recibió 127 mil dólares de la Inter American Foundation), Liz Torres (referente de las logias de ONGs dependientes de la embajada norteamericana), Esperanza Martínez (del movimiento Tekojojá, financiado por USAID, hoy envuelto en escándalo por corrupción), Canciller Hamed Franco (del Pmas, un movimiento financiado por James Cason), el Vice-canciller Jorge Lara Castro (recibe dólares de la embajada a través de la ONG fantasma Alter Vida), Ministro de Defensa General Bareiro Spaini (hombre de la embajada norteamericana, educado en las escuelas de golpistas de Estados Unidos) o el ministro de Hacienda Dionisio Borda, antiguo responsable de las finanzas de los gobiernos corruptos y agente de la embajada norteamericana y del FMI.
Asimismo, Fernando Lugo ha anunciado que se mantendrá la política de sometimiento al imperio nortemericano en Paraguay, y se desconoce lo tratado por Lugo en New York con referentes de la mafia ítalo-norteamericana como John Tonelli, o con el heredero del imperio petrolero que en la década de 1930 llevó a la matanza a cien mil bolivianos y paraguayos, David Rockefeller. Lo único cierto es que ofició de guía turístico en la gran manzana Conrado Pappalardo, un personaje conocido por haber operado para el Plan Cóndor y haber proveído pasaportes para el asesinato en Washington de Orlando Letelier.
Otros cónclaves nunca aclarados por parte del obispo fueron sus reuniones con James Cason y Roger Noriega, pocos segundos después que Aleida Guevara March, hija del Che Guevara, haya abandonado la misma oficina por la misma puerta por la que entraron estos grandes amigos de Cuba y los hermanos Castro.
No se sabe el motivo de las visitas de Christopher McMuller, subsecretario norteamericano de Asuntos del Hemisferio Occidental, al viceministro de Relaciones Exteriores paraguayo, Jorge Lara Castro, un viejo favorecido de la embajada norteamericana de Asunción.

UNA OPERACION ENCUBIERTA DE LA CIA PERFECTA

Todo el andamiaje de la CIA y sus extensiones y derivados, como USAID, la National Endowment for Democracy y la prensa adicta al imperio, se jugó por el obispo Fernando Lugo el 20 de abril.
En Paraguay, llamó la atención que las ONGs recibieran fuertes donaciones a partir de la llegada al país del embajador James Cason, un conocido desestabilizador apadrinado por Otto Reich. El objetivo de la operación encubierta era sufragar la alternancia en el poder, ubicando al obispo Fernando Lugo en la presidencia de Paraguay.
Entre las numerosas organizaciones beneficiarias de estos dólares distribuidos por la administración de George W. Bush que apoyaron a la campaña del obispo, sobresalieron Gestión Local y la Casa de la Juventud, que financiaron con fondos de USAID e IAF a los movimientos Tekojoja y Pmas, como en Nicaragua la NED y otros organismos alternativos de la CIA propiciaron la elección de Violeta Chamorro en 1989.
Las organizaciones no gubernamentales y voluntarias –lo que hoy conocemos por sociedad civil— son conocidas como una extensión de las políticas neoliberales de EE UU en todo el mundo.
La CIA y la US Agency for International Development (USAID ó AID) tienen un protagonismo central en el esquema de promover las ideas y hechos políticos favorables al imperio, y a ellas se añadió un nuevo organismo, creado en 1983, bautizado como The National Endowment for Democracy (NED).
En Paraguay, la NED ejerce un control total sobre la prensa mediática, a la que presenta listas indicando cuáles son los referentes políticos que puede promocionar. Son los principales referentes de la NED los propietarios de ABC color y radio Ñandutí, Aldo Zucolillo y Humberto Rubín, dueños de gran parte de lo que en el país se puede decir. En Brasil, a comienzos de los 60, se utilizaron idénticas operaciones de la CIA junto a las de la sociedad civil opuesta al gobierno, con el resultado de provocar el golpe militar de 1964 contra el presidente Joâo Goulart, que dio comienzo a 20 años de una represión política indescriptiblemente brutal.
En fechas más recientes coordinaron un golpe mediático contra el gobierno de Raúl Cubas en Paraguay (marzo de 1999) y aceitaron a la sociedad civil de oposición al gobierno venezolano de Hugo Chávez, donde el papel de organismos gubernamentales estadounidenses, la CIA y otros como la AID y la NED detrás del fallido golpe de estado de abril de 2002 fue evidente.
El embajador norteamericano James Cason, como un flautista de Hamelín dedicado a cantar folklore paraguayo, fue determinante para alinear a todas las ONGs y fundaciones que reciben dólares americanos detrás del clérigo-presidente, sobrino del agente de la CIA Epifanio Méndez (delatado por Agee) y que perpetúa hoy la tradición familiar.
Entre las organizaciones aparecieron incluso grupos de feministas, que se vieron obligadas a impulsar una candidatura de un obispo católico, a pesar del clásico antagonismo con el Vaticano.
Entre estas supuestas organizaciones civiles estuvieron las feministas de convicciones subsidiadas por USAID como las Mujeres Políticas en Red, Parlamento Mujer, Red de Mujeres Políticas, Red de Mujeres Munícipes del Paraguay (RMMP), Coordinadora Interpartidaria de Mujeres del Paraguay (CIMPAR),), Mujeres Políticas por la Democracia y el Desarrollo,etc.
Son sufragadas desde la embajada norteamericana además de las redes de mujeres, Ideco (Roberto Ferreira), el Partido Demócrata Cristiano, Partido Encuentro Nacional, Patria Querida, el grupo de adherentes del Partido Unace que lidera Emma Rolón, la Red de Contralorías ciudadanas del Paraguay, la Contraloría Ciudadana de Ypané, Afosci, CIDSEP, CISNI, Fedem, Transparencia Paraguay, Semillas para la Democracia, radio Los Angeles, Radio Comunitaria de Villa Elisa, Fundación Tierra Nueva y GEAM, todos estos grupos aglutinados en el Grupo impulsor para la Regulación del Financiamiento Político en Paraguay.
La nómina sigue con Sakã (transparencia, en guaraní), integrada por cinco organizaciones no gubernamentales, Gestión Local, vinculada al Moviendo Tekojoja. Los "proyectistas" son Raúl Monte Domecq y Guillermina Kanonnikoff).
Otros grupos paraguayos financiados por extensiones de la CIA son Decidamos, Instituto de Geopolítica y Estudios Internacionales (IPEGEI), Radio CARITAS, Mujeres Por la Democracia, Centro Paraguayo de Estudios Sociológicos Fundación Paraguaya para la Cooperación y Desarrollo, Centro de Estudios Democráticos (CED), Centro de Información y Recursos para el Desarrollo, Instituto de derecho y Economía Ambiental, Centro de Estudios y Formación para el Ecodesarrollo, Asociación de Empresarios, Comité Paraguay-Kansas, Asociación Afro Paraguaya Kamba Cua, Centro Interdisciplinario de Derecho Social y Economía Política, Fundación Arlequín Teatro", Casa de la Juventud – Paraguay, cuna del Pmas de Camilo Soares, Cooperativa La Norteña y la Escuela Agrícola de Carumbey, Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales.
En el marco de la campaña pro-obispo, maletines de George W. Bush ingresaron en forma encubierta en Paraguay, yendo a parar a los bolsillos de los partidarios del obispo de los pobres y teólogo de la liberación, el marxista clérigo-presidente Fernando Lugo.
Por ejemplo, los 45,226.96 dólares que en nombre del Plan Umbral recibió recientemente la guevarista Casa de la Juventud (ONG que recauda para el PMas) de mano de organismos imperialistas bajo control de George W. Bush, supuestamente para enseñar a estudiantes secundarios algo fundamental: "identificar la corrupción" en Paraguay. Se suma el dinero a los 127.000 con que anteriormente les benefició la IAF. Se añaden en el mismo contexto las fuertes sumas que recibe Gestión Local, ONG cuyos responsables son a la vez financistas de Tekojoja, o los 132.700 dólares que en el 2006 recibió la Fundación Arlequín Tetro (refugio de organizadores de manifestaciones contra la actual administración municipal) para objetivos tan relacionados con el arte escénico como "ayudar a adolescentes de centros educativos a identificar, estudiar, discutir y atender las prioridades de la comunidad". Debemos agregar los 116.300 dólares de George W. Bush recibidos en el 2006 por el CIDSEP, los 95.000 dólares recibidos por la Fundación paraguaya para la Cooperación y Desarrollo del ex intendente Martín Burt, los 94.000 depositados a nombre de la ADEC, los 27.500 donados a la CPES de Domingo Rivarola, los 164.404 aportados a la CED, o las importantes donaciones que reciben el CIRD de Agustín Carrizosa para "apoyar a las organizaciones de la sociedad civil", la IDEA de Patricia Abed, o los sensibles ecologistas de Alter Vida como Jorge Lara Castro.
Como puede advertirse, la lista es bastante extensa y garantiza un amplio control sobre la "sociedad civil" paraguaya. No es la victoria electoral del Obispo Fernando Lugo la primera operación exitosa de la NED, USAID y la CIA en Paraguay, que ya actuó en Paraguay con eficacia varias veces. Por ejemplo, cuando en 1989 se derrumbaba la Unión Soviética, y con ella la propaganda con que el dictador Alfredo Stroessner justificaba sus abusos, se aseguró de promover un cambio a la medida de los intereses imperialistas, limpiando expedientes y ubicando en la presidencia a un célebre narcotraficante.
El mismo año el gobierno norteamericano invirtió mil millones de dólares en el triunfo de Violeta Chamorro en Nicaragua, imponiendo así una jefa de estado con los billetes provenientes de la National Endowment for Democracy, un inofensivo organismo llamado a tomar la posta de la CIA desde 1983.
Considerando inminente el fin de Stroessner, el imperio norteamericano se movilizó en ese entonces para impedir que sus adversarios tomen las riendas a su caída, para lo cual se apresuró a ganar para su causa a los disidentes con una muy buena remuneración.
El encargado de distribuír los dólares para "el cambio" fue el Dr. Carl Gershman, presidente de la NED. La Freedom House funcionó como un embudo por donde pasaron los fondos que concedía la NED, y gran parte de ellos fueron a parar a los bolsillos de los comunicadores destacados.
Radio Ñandutí, a través de la Casa de la Libertad, recibió importantes sumas de dinero de la National Endowment for Democracy (NED). Leonard Sussman, agente de la CIA y Director Ejecutivo de la Casa de la Libertad, realizó una visita a Paraguay a fines de 1987, guiado por Humberto Rubín, estableciendo contactos con varias organizaciones que luego recibirían fondos de la NED. El objetivo era "madurar" la idea del cambio.
A partir de entonces, estos organismos promovieron la estructuración de un andamiaje que hoy controla todo lo que en Paraguay se puede decir, paradójicamente con la coartada de que defienden la libertad de expresión.
Un organismo es la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP), a la que acompaña Cerneco. Reciben con frecuencia los auspicios de USAID. Por ejemplo, el "Foro por la libertad de expresión", organizado por la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP) y CERNECO en noviembre de 2004, fue auspiciada por la USAID (Agencia Internacional de desarrollo de los Estados Unidos). A este "Foro" asistió el señor Kevin Goldberg, "experto norteamericano en Libertad de Expresión y Derecho a la Información". Otro apéndice de la embajada norteamericana es el Centro de Regulación, Normas y Estudios de la Comunicación (CERNECO), fundado en 1990. Humberto Rubin, vinculado con la Nacional Endowment for Democracy (NED), fue presidente de CERNECO entre 1992-2002.
CERNECO proclama que "Surgió como un medio para canalizar inquietudes, ideales y el espíritu de servicio y progreso de un grupo de personas vinculadas al campo de la comunicación masiva".
Se formó una línea de acción que enfocaba el tema del Código de Ética, que regulaba la conducta de los propios medios de comunicación, de las empresas anunciantes y de las agencias de publicidad. Integraron la comisión pro-Código de Ética: Carlos Jorge Biedermann, Rufo Medina e Ilde Silvero. Rufo Medina e Ilde Silvero son empleados de Aldo Zuccolillo, dueño del diario ABC Color. En cuanto a Carlos Jorge Biedermann, basta con señalar que es yerno del general de la "Operación Cóndor", Guillermo Federico Clebsch, egresado de la Escuela de las Américas, detalle que alcanza para conocer cuál es la tendencia de su "ética"
Otra organización vinculada a este grupo es CONAR: Consejo de Autorregulación Publicitaria de CERNECO, un ente privado cuyo objetivo es la autorregulación de la publicidad, proponiendo a través de sus recomendaciones, que los mensajes publicitarios se encuadren dentro de los principios de la legalidad, honestidad, decencia y veracidad".
Toda esa estructura estuvo al servicio del Obispo Fernando Lugo, en una operación magistralmente coordinada por el desestabilizador estrella de George W. Bush, James Cason, y presentada ante la prensa mediática y los incautos como "un gran triunfo de la izquierda". Lo que se dice una perfecta operación encubierta de la CIA en Paraguay.